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Nicaragua

UE denunció violación de derechos fundamentales



Bruselas.- La Unión Europea ha denunciado ayer la violación de derechos fundamentales en Nicaragua tras el sitio policial a una iglesia con opositores y la detención de quienes trataron de introducir ayuda humanitaria, en una acción que los Veintiocho ven como una "señal negativa" respecto a la voluntad del Gobierno de Daniel Ortega de hallar una solución pacífica a la crisis.

"Es un serio revés al proceso político que envía una señal negativa sobre la voluntad del Gobierno de trabajar hacia una salida pacífica y democrática a la crisis", ha declarado la Alta Representante de Política Exterior de la UE, Federica Mogherini. La jefa de la diplomacia europea ha alertado de que la detención de 13 personas entre el 14 y el 15 de este mes durante el asedio a la iglesia de San Miguel de Masaya supone "una infracción de los Derechos fundamentales" de los nicaragüenses, tras lo que ha instado a las autoridades a liberar de inmediato a los detenidos y retirar los cargos.

En su declaración en nombre de los Veintiocho, Mogherini ha asegurado que la Unión Europea mantiene su determinación de continuar utilizando "todos sus instrumentos" para apoyar la democracia y la Justicia en Nicaragua, así como para "reaccionar ante el deterioro continuo de los Derechos Humanos y del Estado de derecho" en el país.

"Los que socavan la democracia y el Estado de derecho en Nicaragua deberán responder por ello", avisa la Unión Europea, quien llama al Gobierno de Ortega y a los organismos responsables de hacer cumplir la ley a "asegurar que se respetan plenamente los derechos constitucionales de todos los nicaragüenses".

También reclama que las autoridades retiren el sitio policial a la iglesia de Masaya y les recuerda el compromiso de respetar la libertad de expresión, de asamblea, religión y a protestar pacíficamente que recogen los acuerdos de marzo cerrados con la Alianza Cívica. La UE cree que solo con la plena aplicación de estos acuerdos, el diálogo inclusivo y creíble y una reforma política y electoral que cumpla los estándares internacionales será posible resolver la actual crisis. (Europa Press)

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