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Santa Clara
* Ya está en cartelera la segunda película de Pedro Antonio Gutiérrez. El filme retrata el universo de los arreadores de ganado a través de un drama con tintes de western que se desarrolla en el Beni, oriente boliviano.
Luego de estrenar su ópera prima “Bárbara” (2017), Pedro Antonio Gutiérrez vuelve a cartelera con su segunda película: “Santa Clara”, que fue estrenada a nivel nacional en todas las salas de cine del país.
El filme muestra a la Amazonia beniana y el oficio del vaquero en su máximo esplendor, según se informa en la página web de esta película nacional que retrata el universo de los arreadores de ganado a través de un drama con tintes de western que se desarrolla en el Beni, oriente boliviano.
Previo a su estreno nacional, Santa Clara fue exhibida en importantes festivales cinematográficos, como el Festival Internacional de Cinema de Cerdaña, España, donde obtuvo una Mención Especial del Jurado en España y en el Festival Internacional de Cine de Guayaquil, en Ecuador, donde obtuvo el premio Iguana Dorada, como Mejor Dirección de Arte.
La historia trata sobre Santiago, un hombre de 40 años que se gana la vida como arreador de ganado. Vive en las afueras de un pueblo alejado del Beni y de él también se dice que es un fugitivo y que tiene un pasado como asesino o bandido. Un día lo van a buscar para ofrecerle un trabajo especial: arrear dos mil cabezas de ganado hasta Santa Clara, una hacienda lejana. Es un trabajo complejo, bien pagado y él necesita el dinero, pero regresar a Santa Clara es regresar a su pasado del que lleva muchos años escapando.
La película es protagonizada por Cristian Mercado y secundada por actores de trayectoria, como Jorge Urquidi, Jorge Arturo Lora, José Chuvé, Katherine Villarroel, Carlos Ureña, Malena Arauz, Ismael Suárez, Hugo Francisquini y la participación especial de Silvana Continanza, actriz venezolana invitada.
El filme, que se desarrolla en los años 60, se basa además en situaciones del día a día, como peleas entre familias, discusiones, arreos de ganado y todas las actividades que ocurren en el campo. Y claro, no dejan de existir los villanos.
Para el trabajo de puesta en escena los equipos de arte y vestuario hicieron una investigación profunda sobre objetos de la época, vestimenta, calzado y costumbres de los hombres de campo que habitaban la Amazonia beniana.
La película ya tiene fecha de exhibición en Estados Unidos tras quedar seleccionada en la trigésima quinta edición del festival de Santa Bárbara, California, a desarrollarse del 15 al 25 de enero del 2020.
Postulando a mejor largometraje de ficción, la segunda película de Pedro Antonio Gutiérrez será proyectada el jueves 23 y viernes 24 de enero.
EL MUNDO DE LOS
VAQUEROS AMAZÓNICOS
Subirse en un caballo chúcaro, caerse de él y volverse a “trepar” porque el animal ya era dueño del papel actoral, fue solo una de las múltiples anécdotas para contar en el rodaje de Santa Clara, la segunda película del director Pedro Antonio Gutiérrez, y de la productora Abubuya (Alejandro Suárez) -después de su ópera prima Bárbara.
Con esta nueva propuesta, Gutiérrez quiere que el público se sumerja en el mundo de los vaqueros amazónicos, de quienes se rodeó en su niñez. “Como director de cine, sueño con contar una historia similar a muchas que escuché de niño, mientras crecía en las tierras amazónicas del noreste boliviano. Me apasiona mostrar en imágenes lo fantástico de la naturaleza de esta zona del mundo, donde nunca se ha hecho una película, pero, sobre todo, mostrar el espíritu de esos hombres callados y valientes, rudos y a la vez compasivos y hospitalarios, que vivieron muy alejados de centros urbanos y de toda institución pública que los reglamente y proteja, siendo ellos mismos los forjadores de su propia ley y de su propio sistema social, mostrando así cómo lo humano se abre campo en la vida”, explica el director en la página web de Santa Clara.
SOBRE EL RODAJE
Santa Clara fue rodada en el año 2018, entre los meses de mayo, junio y agosto, en locaciones del Beni (Loreto y Magdalena) y Santa Cruz (Montero, Saavedra y Pedro Lorenzo), con un equipo de producción que promediaba las 70 personas, entre técnicos, actores, arreadores de ganado y personal de apoyo.
La producción estuvo a cargo de Abubuya Producciones, casa productora radicada en Santa Cruz de la Sierra, Bolivia.
La postproducción de imagen y sonido se efectuó en Filmo Estudios, en Santiago de Chile.
Para el rodaje de diálogos con personajes a caballo, el equipo de sonido tomó muchas previsiones a fin de atenuar el sonido de los animales, el cuero de las monturas y estribos para así captar las voces de los actores.
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