ECONOMÍA    

Análisis económico

Como Venezuela

Humberto Vacaflor



En 2018, un trabajador de YPFB les dijo en público al cocalero Morales y a su ministro de Hidrocarburos, Luis Sánchez, que debían "ponerse las pilas" porque las dos refinerías del país se estaban quedando sin petróleo para refinar.

Es probable que el trabajador haya sido sancionado, o quizá no, pero la situación ha empeorado todavía desde entonces. Ahora son, otra vez, los trabajadores, en este caso de Cochabamba, que alertan sobre el peligro de que una de las dos refinerías del país tenga que dejar de operar, por esa misma razón.

Las cifras son las siguientes: las dos refinerías tienen capacidad para tratar 64.350 barriles por día pero en este momento sólo reciben 48.300, con tendencia a seguir cayendo.

 

El precio cayó en la semana por el huracán Laura. El grupo OPEP + Rusia también ha comenzado a reducir sus recortes de producción y esto debilitó el precio. Sin embargo, las cifras sobre el desempleo en Estados Unidos mostraron una reducción en personas buscando empleo por debajo del millón semanal, durante la semana pasada (881.000). Esto indica a los mercados que la economía estadounidense se recupera más rápidamente de lo esperado.

El precio del oro cayó en 6 % en agosto pero aún está 24 % más caro que en esta fecha del año pasado. El mercado parece haber encontrado un nuevo equilibrio por encima de los US$ 1.900 la onza troy. La demanda mundial se debe en gran parte a la pandemia que lleva a muchos inversionistas a buscar la seguridad del oro. Las cifras sobre el paso lento de la recuperación mundial tienden a sostener el precio elevado del oro.

"La demanda de zinc seguirá recuperándose de los mínimos del segundo trimestre durante el resto de 2020, pero se mantendrá algo por debajo de los niveles del año anterior por la persistente cautela de los consumidores" aseguran los analistas del FastMarquets, especializados el mercado de metales industriales. Apuntan a la similitud con la recuperación después de la crisis financiera de 2008, por lo que el alza actual aún podría continuar.

La razón la conocen todos los bolivianos. El gobierno del cocalero Morales no se interesó en la exploración petrolera para poder reemplazar los yacimientos que estaba sobreexplotando, obsesionado con la idea de despilfarrar los ingresos.

Si ya en 2018 era crítica la situación de la provisión de crudo para las refinerías, consecuencia de la caída en la producción de gas natural, ahora el panorama es dramático.

Los expertos, como Álvaro Ríos o Hugo del Granado, así como otros, recomiendan que, por el momento, para salvar la situación, se acuda a los campos viejos, en declinación, pero al mismo tiempo, y con mayor empeño todavía, hacer lo posible por encontrar nuevos yacimientos.

Es decir que se debería invertir con los recursos propios de YPFB y además atraer inversiones extranjeras, dos opciones muy difíciles, sino imposibles en este momento en que las exportaciones caen y la industria petrolera mundial está casi abandonada.

Se debía haber buscado nuevos yacimientos cuando el país estaba recibiendo diez veces más ingresos por el gas, entre el 2008 y 2014, pero el gobierno del cocalero prefirió estafar al país instalando separadoras de gas, con el nombre de "industrialización", a costos elevados por los sobreprecios, para que ahora estén paralizadas, aunque costaron más 1.000 millones de dólares.

Y llegó a gastar 930 millones de dólares en la planta de urea y manganeso de Bulo Bulo, parada desde hace un año porque es una maquinita para fabricar pérdidas: es antieconómica, además de estar secuestrada por los cocaleros de Chapare, que la consideran de su propiedad privada.

Es decir que el modelo del "Socialismo del siglo XXI" es coherente: ha logrado que el país con la mayor reserva de crudo del planeta (Venezuela) no tenga gasolina para el consumo interno y ha conseguido que la "Bolivia saudí" se quede sin gas ni petróleo. ¡Y pensar que hay políticos en el mundo que todavía creen en ese modelo!

El gobierno anuncia que ha ordenado una auditoría de la Gestora Pública, cuando arrecian las protestas de los trabajadores que exigen la devolución de sus aportes para la jubilación.

Las auditorías debían haber sido hechas cuando comenzaba este gobierno, lo que hubiera permitido saber en qué estado había quedado el país tras la precipitada fuga del cocalero.


¿Comercio libre?

En Venezuela las empresas solo están autorizadas a vender el 20 % de su producción. Pero el presidente Nicolás Maduro aseguró en un programa de televisión que ahora esto pasará a 30 %. Él cree que así se apoya a la producción en su país que está apegado de exportar petróleo por el fracaso en el manejo de Pdvsa, la estatal petrolera.

Una buena noticia

Argentina ha logrado reestructurar casi la totalidad de su deuda externa bilateral que supera los US$ 66.000 millones. Esto significa un ahorro de US$ 37.700 millones en 10 años, ya que los intereses pasan de 7 % al 3,07 % y se aplazan varios vencimientos. Ahora buscarán renegociar el crédito de US$ 58.000 millones con el Fondo Monetario Internacional.

Inversión en salud

El presupuesto en el sector salud de Perú para el 2021 aumentará a US$ 5.919 millones de soles, lo cual implicará un incremento de 13,2 % en comparación con lo registrado en 2019. Según María Antonieta Alva, ministra de Economía y Finanzas, Esto incluye US$ 1.159 millones destinados a "contener" la pandemia del Covid-19.

Lo bueno

Es que la vacuna de procedencia rusa contra el Covid-19 será importada a Bolivia por empresas privadas, que anticipan un precio unitario de 10 a 14 dólares.


Lo malo

Es que, según criterios difundidos en Europa, el laboratorio ruso que produjo esa vacuna no cumplió con todos los pasos exigidos por las normas científicas en el mundo.




Lo feo

Es que la vacuna que se ha elaborado en Oxford por una sociedad sin fines de lucro, pero que cumple con todas las exigencias científicas, costará solamente 4 dólares.

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