OPINIÓN    

Sistema de enseñanza programada

José Antonio Navia Alanez



Si hacemos un análisis, en lo político, económico y social, de la historia de nuestra Patria, encontraremos un gran defecto, la carencia de virtudes, éticas, morales, espirituales, además de problemas como pobreza, discriminación, ignorancia, corrupción, falsedad, etc. De qué sirve que tengamos las mejores leyes, si no las respetamos. El respeto a la ley y a la autoridad es indispensable, por cuyo acatamiento nace en el ciudadano la disciplina y la nación se transforma, así como la mente y la conciencia del ser humano.

Debemos comenzar a dedicarnos a la educación de las nuevas generaciones, sabiendo que los jóvenes algún día tomaron las riendas del país. Es evidente que esta pregunta debería hacerse el Ministerio de Educación, y debería saber que una educación en valores es fundamental para los estudiantes, porque lo ayudará a desarrollar sus ideas y criterios, para que tengan una vida moral sana. También los conducirá a tener criterios propios.

Tenemos un nuevo modelo educativo y todo cambio debe tener un objetivo, qué mejor si es en la educación.

La educación tiene un gran propósito, que es la preparación de los estudiantes para la transformación positiva de todas sus capacidades intelectuales, desarrollar su formación en valores, la cual debe ser integral y procedimental. Hoy más que nunca debemos fomentar el estudio de las grandes virtudes, para hacer frente a una sociedad que está pasando por un mal momento, cuando estamos viviendo una época de grandes tentaciones, todo lo que nos está llevando a una sociedad decadente.

Nuestros centros educativos de primaria, secundaria, institutos superiores y universidades, deben ser grandes formadores de ideales nobles, porque cultivando valores estaremos formando hombres con principios diáfanos, idóneos, y con nobleza de sentimientos.

Por todo lo impuesto es una necesidad imperiosa modificar el modelo educativo boliviano, porque no se adecua a esta era moderna, marcada por una cultura materialista, consumista, hedonista, individualista, etc. El vigente modelo socio comunitario da lugar más al área de los saberes, creando grandes vacíos en el área de los valores. Comunidad significa compartir, solidaridad, colaboración, unidad, lo cual no hay en este modelo. Una educación puramente cognoscitiva no puede llamarse educación, o si solo vamos a formar estudiantes egoístas, sin criterios. Para salir de este subdesarrollo mental debemos implantar un nuevo sistema educativo, que es el Sistema de Enseñanza Programada, que tiene un gran objetivo, que es nutrir y alimentar la mente del estudiante con una educación moral, que le transmitirá principios axiológicos y éticos (artículo 79 de la Constitución Política del Estado). Así también este sistema se basa en dos puntos fundamentales:

Qué clase de estudiantes queremos formar, qué clase de sociedad queremos tener; la educación que hoy se da es de información y no de formación. Formación significa desarrollar actitudes, curiosidades, criterios, capacidades en el estudiante. Si no preguntamos, ¿cómo lograremos esta enseñanza programada? Este modelo educativo debe empezar en los primeros grados de la escuela, enseñando formación moral a la niñez. Si en la vida no se enseña valores desde temprana edad, la vida toma otro rumbo. Por todo esto debemos promover esta enseñanza en las escuelas, porque aquí es donde se moldea al ciudadano del mañana.

Con esta enseñanza programada vamos a potenciar las capacidades de los estudiantes, para autocontrol y racionalidad, así también vamos a promover una cultura de paz y lograremos evitar el bullying.

Haciendo un reordenamiento en nuestro sistema educativo evitaremos muchos dilemas, en lo que respecta a la formación en valores de los estudiantes. Con este modelo de enseñanza programada lograremos que los estudiantes tengan otras cualidades y sean más reflexivos. Que todo esto sea un principio elemental para profundizar nuestros sentimientos de patriotismo, y amor a nuestra Patria, que tanto nos hace falta.

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