Sobre la educación descolonizadora

En la época republicana hasta los últimos años, la educación ha sido colonialista, cognitivista y fragmentaria; solo conocimientos importados han sido impuestos en la práctica educativa, como el uso de la lengua castellana, la vestimenta y otros al margen de las necesidades y expectativas reales del contexto sociocultural, mientras que los saberes propios y los valores culturales del contexto local, regional y nacional fueron desechados, sin aplicabilidad en el ámbito educativo.

Cuando surge el Modelo Educativo Sociocomunitario Productivo en Bolivia, mediante la Ley 070 de Avelino Siñani y Elizardo Pérez, como respuesta a la problemática nacional de la condición colonial y neocolonial de la educación, las y los maestros pensábamos que era uno más de tantas reformas educativas que se han dado en nuestro país a lo largo de la historia republicana. Pero en el proceso de implementación del mismo, nos damos cuenta que el modelo en cuestión tenía en su contenido aportes significativos y cambios profundos y estructurales en relación con el sistema educativo colonialista vigente hasta el año 2010.

Uno de los aportes trascendentales del Modelo Educativo Sociocomunitario Productivo fue la Educación Descolonizadora, en la que los saberes y conocimientos propios del contexto, como el uso de la lengua originaria, la religión, la vestimenta y otros valores culturales, se los rescata y revaloriza para incorporarlos en el proceso educativo local, regional y nacional, sin descartar los conocimientos generados universalmente. Es decir, ambos conocimientos tienen el mismo valor de aplicabilidad en el proceso educativo.

La experiencia de Warisata fue un aporte valioso en el pasado, que ha desarrollado una educación comunitaria, para cambiar la educación de tipo colonial reinante en esa época, por una educación acorde a la vida, una pedagogía relacionada con la producción y la liberación del esclavismo. Esta experiencia no fue aprovechada en el ámbito educativo de nuestro país, sino que otros países se apropiaron de esta valiosa experiencia para aplicarla en su realidad. Sin embargo, el actual Modelo Educativo la ha tomado como base fundamental para construir la Educación Sociocomunitaria Productiva y de esta manera fortalecer la Educación Descolonizadora.

Las experiencias de las y los maestros son aportes propios y creativos, que han nacido en la misma práctica pedagógica del aula, a través de la interacción cotidiana entre maestros, maestras, niños, niñas y jóvenes estudiantes; no obstante, el sistema educativo colonialista y tradicional del pasado no las ha tomado en cuenta como una estrategia valiosa en la práctica educativa, sino que las ha considerado algo inútil e improductivo. Pero actualmente estas experiencias innovadoras de las y los maestros fueron sistematizadas y tomadas muy en cuenta por el actual Modelo Educativo Sociocomunitario Productivo para incorporarlas y fortalecer la calidad de aprendizaje de los estudiantes.

Las experiencias del contexto internacional no han sido desechadas, han sido incorporadas en el ámbito educativo por el Modelo Educativo Sociocomunitario Productivo, como aportes importantes para fortalecer la Educación Descolonizadora. Entre ellos podemos rescatar la pedagogía liberadora de Paulo Freire, la pedagogía crítica de Vigotsky, el aprendizaje significativo de Ausbel y de otros autores que son dignos de mencionar en el campo educativo de nuestra realidad.