Franz Tamayo

Bolivia, julio de 1956.- Falleció aquí, a los 77 años, el escritor Franz Tamayo.

El escritor, otrora presidente de la Cámara de Diputados, vivía hace algunos años casi encerrado en su casa de la calle Loayza, escribiendo muy de vez en cuando algún mensaje político.

En 1950 escribió un artículo que proyectaba la salida de Bolivia al corredor del Pacífico a cambio de la utilización por Chile de las aguas del lago Titicaca.

De más atrás en el tiempo data su polémica con Fer-nando Diez de Medina, a propósito de la biografía al “modo fantástico” que le dedicara este último.

En ella, Tamayo, después de fulminar a su biógrafo, predijo en el folleto llamado “Para siempre”, que a su muerte la sociedad paceña grabaría en bronce una leyenda con la frase: “Este es Franz Tamayo. Su gloria es mi propia gloria”.

Sin embargo, una calificada fuente allegada a su viuda comentó que el poema predilecto de Tamayo, que repetía a menudo en sus últimos días, era el siguiente:

“Yo fui el orgullo

como se es la cumbre,

y fue mi juventud el

mar que canta.

¿No surge el astro ya

sobre la cumbre?

¿Por qué soy como un

mar que ya no canta?

No rías, Mevio, de

mirar la cumbre,

ni escupas sobre el

mar que ya no canta.

Si el rayo fue, no en

vano fui la cumbre,

y mi silencio es más que

el mar que canta”.

De El Chasqui