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Segunda semana de conflictos

Iglesia llama a la calma y pide paz entre bolivianos

> Para el clero en esta situación conflictiva, no es sensato apelar a movilizaciones y contra movilizaciones que pueden desencadenar fácilmente en enfrentamientos y saldos lamentables


Monseñor Giovani Arana.
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Ante el escenario creciente de conflictividad en todo el país por las denuncias de indicios de fraude electoral, la Iglesia Católica expresó su preocupación por la crisis política social y convocó a la sociedad en su conjunto a evitar la confrontación y violencia entre bolivianos.

El obispo auxiliar de la Diócesis de El Alto, monseñor Giovani Arana, advirtió que, Bolivia está dividida por el capricho de unos cuántos agentes políticos a quienes exhortó a buscar una salida pacífica.

“Lamentablemente vemos una Bolivia enfrentada, llamamos a la calma, a la no violencia, no nos dejemos ganar por la rabia, acompañemos este momento también con nuestra oración, hoy más que nunca nuestra Bolivia necesita que recemos”, expresó en su homilía dominical desde la Basílica Menor de San Francisco en la ciudad de La Paz.

Ante la difícil situación en que se encuentra el país, reiteró el llamado de los Obispos de Bolivia que convocaron a viabilizar una salida pacífica y concertada por el bien común del pueblo.

Dijo que la Iglesia Católica expresa su total predisposición a colaborar en el proceso de pacificación del país y exhortó a los fieles a ser misioneros de reconciliación, constructores de lazos de comunión y no de división.

Monseñor Arana recordó este domingo 27 de octubre el Día Mundial de las Misiones, invitando a ser humildes con actitud madura, reconociendo las equivocaciones y estar permanentemente en oración.

“Se trata de ser realistas, de reconocer también que como mortales, fallamos, solo Dios no se equivoca, nosotros por el contrario fallamos, reconocer eso nos hace humildes, no reconocerlo nos hace soberbios”, advirtió.

La pasada semana, la Conferencia Episcopal Boliviana (CEB) a través de un comunicado pidió que se realice una segunda vuelta electoral pero con “supervisión imparcial” con el fin de lograr una salida pacífica a la crisis política que se generó después de las elecciones del 20 de octubre.

“El gran problema de las elecciones en Bolivia es que no se dan a conocer los resultados finales. Creo que el Tribunal Electoral ha perdido toda credibilidad, no solamente con estas elecciones sino ya con las anteriores, y por eso Bolivia vive una incertidumbre. Creo que la salida es convocar a una segunda vuelta, pero será con otro Tribunal, porque si seguimos con el mismo el problema continúa”, manifestó el presidente de la Conferencia Episcopal Boliviana (CEB), monseñor Ricardo Centellas.

Ante la escalada de violencia en todo el país por los indicios de fraude electoral, los representantes de la Iglesia Católica convocaron a la sociedad en general a evitar la confrontación entre los bolivianos.

“Nos preocupa el peligro de confrontación entre bolivianos que nos amenaza, ante un proceso electoral que, a pesar del comportamiento ejemplar de los votantes, ha perdido credibilidad por las irregularidades que han tenido lugar en los tiempos y resultados del proceso de cómputo de las elecciones generales”.

 
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