La rebelión valerosa

El 27 de mayo de 1812, en la ciudad de Cochabamba, el general realista Jerónimo Marrón de Lombera atacó la ciudad después de vencer en la Batalla de Pocona. En Cochabamba fueron principalmente mujeres las que se atrincheraron en la colina de San Sebastián, en el lugar conocido como la Coronilla, donde las tropas realistas las vencieron.

Reseña

Ante el asedio de las tropas del General realista Manuel de Goyeneche y el fallecimiento de la mayoría de hombres, un grupo de mujeres, jóvenes y niños dirigidas por la anciana ciega Manuela de Gandarillas defendieron sus hogares, contando como únicas armas, palos, cuchillos, barretas y piedras.

La rendición del Gobernador de Cochabamba Antezana, ocasionó la rebelión de estas valerosas mujeres y Goyeneche no aceptó el acuerdo, por lo que el 27 de mayo de 1812 hizo entrar a sus tropas permitiendo que por dos horas saquearan Cochabamba. Las tropas forzaron los domicilios buscando a los líderes, incluyendo la finca de Esteban Arze, donde su esposa Manuela Rodríguez Terceros enfrentó a los que irrumpieron en su hogar. Las mujeres salieron a las calles con sus hijos protestando contra los allanamientos al grito de “¡Nuestro hogar es sagrado!” y dirigiéndose a la colina de San Sebastián. Goyeneche cercó la colina donde se concentraba la resistencia y la capturó después de dos horas de combate.

Legado

Manuel Belgrano diría al gobierno de Buenos Aires “”¡Gloria a las cochabambinas que se han demostrado con un entusiasmo tan digno de que pase a la memoria de las generaciones venideras!”. Esta fecha es celebrada en Bolivia como el Día de la Madre boliviana.