¿Hay nuevos santos bolivianos?

Luego de convenir la hora y el lugar de la visita anual que realizará el alma de don Nemesio Racacha a su inconsolable viuda mi discípula periodista que me colabora en la redacción de esta columna periodística, la cochalita me hizo entrega de una variada cantidad de “tanta-guaguas, maicillos y otras masitas tradicionales”, obsequio que agradecí.

Puestos a trabajar, la cholita me pidió humildemente que le explicará quiénes son “todos los santos” a los que la liturgia católica honra en este día, pues ella suponía que mis conocimientos doctrinales eran superiores a los suyos.

Exprimiendo un poco mi magín, le manifesté a la cholita que los santos son aquellos seres que cumplieron en vida la voluntad de Dios, o sea que amaron a su Creador y amaron a sus prójimos. Como los santos son muchos y nuestro actual calendario resulta pequeño para honrarlos en un día especial, existe la fiesta de Todos los Santos para recordarlos a todos y honrar a todos los que fueron reconocidos por sus virtudes por las autoridades máximas de nuestra Iglesia Católica Apostólica y Romana.

Esta mi explicación dejó un poco triste a la cholita, quien me preguntó con sincera ingenuidad si nuestro presidente vitalicio Evo Morales estará en camino hacia la santidad y si algún día veríamos su imagen en los altares con el nombre de San Evo de Orinoca.

Me llevé las manos a la cabeza ante semejante barbaridad y dije a la cholita cochabambina nacida en Quillacollo que admito su admiración por Evo Morales pero que los caminos de la política están muy alejados de los caminos de la santidad, pues lo que más he advertido en estos últimos diez años es el permanente despliegue del engaño, la mentira y la deshonestidad, por lo cual nada más lejano de la santidad que políticos que transitan por los pasillos del Palacio Real de Evo.

Mi contrariedad tan rotundamente manifestada apabulló a mi generosa comadritay, quien sólo atinó a preguntarme muy suavemente: “¿Y Alvarito no podría llegar a ser santo y ocupar algún altarcito menor ubicado en la nave izquierda de algún templo…?”. No pude menos que sonreír ante lejanísima posibilidad después de que él declaró muchas veces ser materialista, marxista y ateo, pues sigue pregonando que Marx vive aún.

Al final de un largo diálogo, la inteligente cochalita me confesó que me había hablado de la posible santidad de San Evo de Orinoca, de San Álvaro de Sacaba y también de San Juan Ramón de la Quintana, y de San Luis Arce Catacora, santo de las bóvedas del Banco Central y también de Santa Nemesia Achacollo y de las Santas Bartolinas vírgenes y mártires sólo para hacerme enfadar un poquito y reírnos después en este hermoso día de Todos los Santos.