Limpieza de las emociones y las leyes de la vida

Las emociones suprimidas y reprimidas siguen existiendo en nuestra mente interior, podemos negarlas, podemos enterrarlas pero no mueren, siguen existiendo y llamando nuestra atención en forma de sensaciones y si no les hacemos caso, pueden provocar otro tipo de desórdenes que prefiero no mencionar.

Las emociones suprimidas y reprimidas pueden ser contactadas con los ejercicios de epetición verbal y pueden ser reconocidas, re-experimentadas y descargadas después de haber aceptado la lección que nos quieren enseñar.

Las emociones nos enseñan valiosas lecciones que nos pueden guiar por el camino del éxito personal, relacional y laboral en nuestra vida y, sobre todo, nos enseñan a no volver a cometer los errores en los que incurrimos una y otra vez en la vida.

Por el contrario, las emociones negativas suprimidas, reprimidas o practicadas abiertamente producen sus propios resultados negativos alterando el orden natural de todos los sistemas que conforman nuestro organismo físico.

Como bien sabemos, las leyes de la vida traen de retorno todos los pensamientos, actos y sentimientos que emitimos en la primera etapa de nuestra vida y nos retornan en forma de situaciones y circunstancias que se corresponden exactamente con el tipo de causas que emitimos en los tiempos de nuestra vida cuando había que sembrar y es por esta razón que vivimos cosechando lo que sembramos en el pasado de nuestra vida.

Vamos a un ejercicio para que podamos aprender a borrar un engrama que no nos deja estar en paz ni felices dentro de la línea temporal; todo lo que hay que hacer es, con el cuerpo recostado y con control de tiempo, durante nueve minutos repetir la siguiente oración inductora: “No puedo estar ni en paz ni feliz en ningún momento del día”.

Debe repetir la oración inductora por nueve minutos o hasta que salgan varios bostezos profundos de su ser interior, las sensaciones de alivio que se obtienen son increíbles.