Devastadora política de libre comercio

La economía nacional muestra un amplio e ilimitado desarrollo del libre comercio con países extranjeros, mientras, por otro lado, practica una ostensible política antiproteccionista a ultranza, siendo sistemas comerciales que tienen extraordinario efecto negativo en las labores de producción del país, afectando en particular a la industria y la agricultura.

La observación de las estadísticas oficiales de la economía nacional dejan ver que el libre comercio oficial se ha convertido en la base de la política económica del gobierno actual, política que, por lo demás, tiende a consolidarse y extenderse sin la posibilidad de que sea revisada y menos anulada. Sigue ciegamente la corriente establecida por el neoliberal Decreto Supremo 21.060 hace más de 20 años.

Esa política se traduce en hechos palpables, como la libre importación y libertad de contrabando de frutas de países vecinos y aun lejanos. Como principal efecto de esa política, la producción de fruta nacional poco menos que ha desaparecido y si existe es con precios cada vez más prohibitivos, por lo que el público prefiere lo importado por sus precios bajos, etc.

Entre otros varios casos se tiene el de la industria que se ve afectada, por ejemplo, con la importación de ropa, que ha puesto al borde del colapso a decenas de industrias de vestido y arroja al desempleo a cientos de “maestros” y obreros y obliga el cierre de sastrerías de todo tamaño.

Otro ejemplo es el de los cigarrillos, artículo cuya importación ha crecido tanto en valor como en volumen, según revela el Instituto de Comercio Exterior (IBCE). En efecto, las importaciones se han cuadruplicado y el volumen ¡quintuplicado! Se recuerda que en otros tiempos había empresas nacionales de cigarrillos que abastecían el mercado y se consumía tabaco nacional. Esas empresas ya no existen.

Actualmente Bolivia importa cigarrillos de 17 países, como Argentina, Cuba, China, Paquistán e inclusive Bangladesh y Hong Kong. Además, por contrabando se interna cigarrillos de Paraguay y Brasil. De Corea del Sur en 2012 se importó 331.595 kilos, mientras en 2016 se importó 2.001.777 kilos de tabacos por 3.741.000 dólares; de India se pasó de importar, en ese mismo lapso, de 47.000 kilos a 705.001 kilos de tabacos. Cuba nos envía puros en crecientes cantidades.

En cuanto a valores, el problema es mayúsculo, pues en 2012 la importación de cigarrillos fue en total de 5.264.329 dólares, en 2016 subió a 20.387.319 dólares.

Esos datos estadísticos del IBCE sobre el libre comercio son aún más notorios con otros sectores económicos. Entre tanto, se ignora y hasta se repudia el proteccionismo, mientras la industria y la agricultura nacionales agonizan y están condenadas a muerte.