Acelerador lineal para combatir al cáncer

La gobernación de La Paz anunció que en el Hospital de Clínicas “desde diciembre próximo funcionará el acelerador lineal que se adquirió con el importe de 35 millones de bolivianos”. El anuncio es bueno y oportuno porque los pacientes con cáncer aumentan de día en día (ED 12-9-18).

Este instrumento, producto de alta tecnología científica, con el que cuentan casi todos los países del mundo, era urgente que sea adquirido hace mucho tiempo, conjuntamente otros equipos similares que sirvan en los hospitales de todo el país. En mucho tiempo de auge financiero en el país, era posible pensar y atender prioritariamente la salud en el país y, para ello, adquirir todos los equipos necesarios; pero más han podido las políticas que destinen mucho dinero a gastos dispendiosos e innecesarios, que atender la salud y la educación, como labores prioritarias que debió cumplir el gobierno.

Es algo positivo que, finalmente, se instale un equipo tan importante en el Hospital de Clínicas de La Paz que, además, requiere y con mucha urgencia de muchos otros equipos de diversa índole para atender diálisis, enfermedades pulmonares, males crónicos estomacales, problemas cerebrales y otros que, conjuntamente equipos de laboratorio y de gran apoyo en quirófanos, son absolutamente necesarios; equipos que, en todo caso, hay en oferta en los grandes centros científicos quirúrgicos en los países ricos y desarrollados, que fabrican equipos médicos de última generación. Las mismas provisiones deben ser destinadas a hospitales del país.

Enfermos de cáncer que recurren al Hospital de Clínicas generalmente no tienen medios para acudir a servicios como los de El Alto u otros sitios; precisan que el servicio existente en el Hospital de Clínicas sea debidamente atendido y no ocurra como con otros instrumentos, descuidados y abandonados “en espera de repuestos” que nunca llegan. El cáncer es un mal letal y quienes no son tratados en el tiempo debido, generalmente solo esperan saber cuánto tiempo de vida les queda. Cualquier tratamiento de cáncer, según los galenos oncológicos, con el debido tiempo es curable o, por lo menos, sirve para prolongar la vida del paciente, disminuyendo los estragos que causa la enfermedad que en la mayoría de los casos es mortal.

La gobernación de La Paz tendrá que esmerarse -pese a su escaso presupuesto- para licitar la compra de muchos equipos que requiere la salud; hacerlo implicará que, finalmente, se dé prioridad a la atención de la salud de la población sin recursos y que, en muchos casos, se debate en la pobreza y desatención a su salud. Hay prioridades -como la salud y la educación- que no admiten esperas ni descuidos y requieren de mucho amor, honestidad y responsabilidad.