Nacimiento del Dr. Pedro Nolasco Crespo Gómez y Díaz

PARTE II

El Dr. Crespo fue casado

con la hija de un rey

En 1785, don Pedro Nolasco hizo un viaje a España, llevando recomendaciones de personajes de prestigio de Lima, La Paz y Buenos Aires para la corte de Madrid. El rey Carlos III que se impuso de tales recomendaciones, y encontrando en el recién llegado a un hombre de distinción, amanerado, culto y amante de su rey, lo admitió en su corte destinándolo a su servidumbre real, como ayudante de honor.

Cinco años permaneció Crespo en Madrid. En 22 de noviembre de 1790 contrajo matrimonio con doña María Antonia Josefa Cesar Gianini de Casas Novas Laffite Díaz del Castillo, condesa de Laffite e hija natural del rey don Carlos III, habida en la condesa de Laffite, antigua dama de honor de la difunta reina María Amalia de Sajonia.

El rey Carlos había llegado a prendarse del simpático criollo americano, y para darle una muestra de su estimación había consentido que se uniese en matrimonio con su citada hija; a quien había conferido el título de condesa de Laffite, el mismo que llevaba la madre.

Su regreso al Perú

Deseoso el rey de que la hija natural se alejase de Madrid, donde su presencia sin duda no la creía conveniente, había pedido a Crespo que eligiese un destino en América, donde luego marcharía con su esposa. Don Pedro Nolasco con moderación ejemplar, aunque poco envidiable en este caso, había pedido sólo el modesto cargo de “contador de las cajas reales” de su ciudad natal, La Paz, lo que en el acto le fue concedido.

El rey había querido aprovechar este viaje para alejar también de Madrid a otro hijo natural que tenía habido en una princesa napolitana: don Francisco de Paula Sanz.

En diciembre de 1790 don Pedro Nolasco Crespo, en compañía de su esposa y de su cuñado, don Francisco de Paula Sanz, emprendió viaje de regreso a América.

Después de una corta permanencia en Buenos Aires, don Pedro Nolasco y su esposa se trasladaron a La Paz. Sanz se quedó en Buenos Aires, y de allí se dirigió a Potosí con el cargo de gobernador intendente, habiendo sido fusilado en 1810 por el sanguinario jefe argentino Juan José Castelli.

El Dr. Crespo, restituido a su ciudad natal, se posesionó del cargo que le había conferido el rey y lo desempeñó hasta su muerte.

El gobernador intendente de La Paz, don Juan Manuel Álvarez, deseoso de tener a su lado a un hombre del valimiento del Dr. Crespo, lo nombró su asesor, cargo que desempeñó durante el gobierno de aquel, sin perjuicio de sus funciones de contador de las cajas reales. En 1793 don Pedro Nolasco fue nombrado gobernador intendente y justicia mayor interino de La Paz, y ejerció el cargo por seis meses,

El Dr. Crespo falleció en La Paz el 5 de febrero de 1807, a los 53 años de edad.

Los descendientes del Dr. Crespo

Don Pedro Nolasco tuvo varios hijos, nacidos todos en La Paz. El primero, José Bernardo, habido antes de su viaje a España, nació en 1779 y fue su madre doña Petrona Montalvo, moqueguana. Don José Bernardo se casó en 1799 con doña María Manuela Ortiz y tuvo a Manuel Camilo (1800-1869), a Baltazar José (1805-1831), a José Manuel, que fue general de la República (1812-1869) y por último a Teresa (1808-1870). Este mismo don José Bernardo tuvo todavía dos hijos en la célebre heroína de la independencia doña Vicenta Juaristi Eguino: Benita y José María Eguino, troncos ambos de numerosas y distinguidas familias.

Los otros hijos de don Pedro Nolasco fueron María Gertrudis, nacida en 1791; María Gabriela, en 1793; Andrés María, en 1795; María de las Mercedes, en 1797.

Todos los datos que acerca de la vida de Dr. Crespo registran las obras de Mendiburu Alcedo, Aranzaes, Cortés, etc., son erróneas en su mayor parte, especialmente los que se refieren al lugar de nacimiento.

Las referencias que nosotros consignamos están tomadas de documentos autorizados de los que disponemos en nuestros archivos sobre la vida de este sabio.

EL DIARIO, 31 de enero de 1923

gonzalocrespo30@gmail.com