Camaradería, otra fortaleza acorralada en la Policía

Salomón Abad Sejas Tapia

El “camarada” fue también una expresión utilizada en el funeral del poeta Pablo Neruda. Al fin de cuentas, la palabra camarada, así como su variante compañero, fue popularizada por los bolcheviques durante la Revolución rusa y aunque inicialmente llevaba una fuerte connotación en los ejércitos europeos, no dejó de significar una estrecha amistad entre soldados y oficiales que vivían en la misma cámara, compartiendo beneficios, pertenencias, peligros e infortunios.

El “camarada”, como cualquier otro ser humano, es sumamente complejo, pero si el individualismo, que es pariente cercano del egoísmo y descendiente directo de la egolatría, pudiera por voluntad propia pretender un ambiente propicio, seguro que los “camaradas” policías se disputan su tutela. Al final de cuentas, muchos de ellos hablan el mismo idioma, comulgan con el mismo santo, se nutren de las mismas fantasías, pueden igual ir a misa o a una cesión espiritista, y al salir, conspirar amigablemente con sus demonios, que son los mismos destripadores cornudos que asesoran políticamente a los otros megalómanos.

Los “camaradas” que en algún momento de su vida comieron del mismo plato y hasta se juraron amor eterno, no podrán evitar llegar juntos a la misma meta, donde la suerte les será esquiva a muchos y el favor político generoso con algunos. Al final, igual terminarán enfrentados. Maldiciendo, tragándose su impotencia o simplemente confabulando y festejando con sus “caritativos tutores” que, al igual que ellos, desdeñan la solidaridad, la cooperación, el compromiso; la camaradería.

Esa expresión (camaradería) que además apela a la lealtad, el honor, la solidaridad, la profesionalidad y que refiere la estrecha amistad entre soldados y oficiales que comparten en las buenas y las malas, es sin duda una de las fortalezas acorraladas por la acción y omisión de los propios servidores públicos de la institución del orden, que toleran indiferentes el manoseo institucional que promueven los megalómanos perturbados por el poder, frente a la mirada perdida de autoridades que aún no alcanzan a imaginar un plan de reforma policial y menos poder elaborarlo.

Ese ingrato final que se vislumbra como la única luz al final del túnel (en el pináculo de la carrera policial) es el referente del oficial recién egresado, donde el honor, la solidaridad, la profesionalidad son una simple retórica que los “perturbados por el poder” fingen no comprender, incluso estando en el umbral de un viaje sin retorno, como el resto de los mortales prejubilados; vulnerables y en pos de una dramática lucha por seguir teniendo vigencia en una institución que ya les dio la espalda mucho antes de que partieran a su último destino.

Esperemos que estas nuevas autoridades del Viceministerio de Gobierno y Seguridad Ciudadana puedan advertir, a partir de su profesionalismo y compromiso, el riesgo que corre la seguridad ciudadana ante la ausencia de un plan de reforma policial, ya que el Sistema Nacional de Seguridad Ciudadana se fundamenta en el establecimiento de la corresponsabilidad institucional, la participación ciudadana y el control social.

TITULARES

 
Revistas

Usurpado el 7 de octubre de 1970, por defender
la libertad y la justicia.
Reinició sus ediciones el primero de septiembre de 1971.

EL DIARIO
Decano de la Prensa Nacional
Miembro de la Sociedad Interamericana de Prensa y la Asociación Nacional de Prensa.

Dirección:

Antonio Carrasco Guzmán
Presidente del Consejo de Administración

Jorge Carrasco Guzmán
Gerente General

Rodrigo Ticona Espinoza
Jefe de Redacción

"La prensa hace luz en las tinieblas
y todo cuanto existe de progreso en el mundo
se debe a su inagotable labor"...

JOSÉ CARRASCO


Publicidad
Portada de HOY

JPG (804 Kb)      |       PDF (389 Kb)



Caricatura


Sociales

"EL CHEF SOY YO" EN SU DÉCIMA VERSIÓN

Iván Ruiz, Javier Di Giacomo, Valeria Bacarreza, Nels San Martín y Vania Tapia.