La salud está en segundo plano

La salud de todos los bolivianos está en juego, pues es tan penoso ver las formas de atención en los diferentes hospitales de nuestro país, al tener que utilizar materiales que ya están en desuso, porque no han sido modernizados esos centros de salud, ya que no cuentan con el apoyo del gobierno, del Ministerio de Salud, que no aportan para los medicamentos y la alimentación de pacientes que llegan en busca de ayuda.

Vivimos en una etapa en la que lo más valioso no es tomado en cuenta, la salud, por varias razones, como que los que pugnan por gobernar prometen varias cosas en tiempo de elecciones y cuando son elegidos no cumplen con la mayoría de sus ofrecimientos. Por estos cambios de actitud y otros factores alarmantes, la salud pasó a ser lo menos importante en un país donde se le debería dar prioridad.

La situación del hospital del tórax, como la de muchos otros centros de salud, es deplorable, pues se sabe que la humedad está destruyendo sus salas. Las rajaduras aumentan por la antigüedad del recinto, hay filtraciones de agua por falta de mantenimiento en las conexiones. Y faltan medicamentos, como en los demás hospitales. Este hospital no cuenta con un cardiólogo desde hace más de cinco años, lo que es inadmisible, ya que el hospital del tórax debería contar con uno o más.

En el hospital de clínicas llamó mucho la atención el uso de un taladro doméstico para hacer cirugías en traumatología y en neurología, pues es un instrumento inapropiado, aunque necesario en estos momentos para ayudar a personas. Esta es la realidad tan deprimente que se ve en los nosocomios de la ciudad de La Paz. También por falta de aparatos indispensables, como los de rayos x, tomógrafos y demás, es que la gente teme lo que pueda suceder en tal situación. Es alarmante que no se dé atención a estos reclamos y pedidos que por años se vino haciendo.

Se conocía que los gobiernos de turno reciben los recursos del IDH para atender las grandes dificultades de la población, sin embargo estos recursos no abastecen a ningún centro médico.

El problema es la desatención del actual gobierno, que observa de palco el sufrimiento de su gente, de aquella que lo eligió para que tome las riendas del país. Que cumpla lo que prometió y no deje padecer a los pacientes, por no ser atendidos a tiempo.