Es importante la salud mental

Toda persona a simple vista luce sana, pero lo que se desconoce es qué sucede en su mente, cómo se encuentra su estado emocional, psíquico y social. Todo aquello que afecta de alguna manera a su forma de pensar, sentir y actuar frente a la vida. Y la importancia que tiene en sus distintas etapas: niñez, adolescencia y adultez.

“La salud mental es un arte y ciencia al mismo tiempo, suele entenderse como la situación de equilibrio que el individuo experimenta respecto a todo lo que le rodea. Cuando se consigue este estado, la persona puede participar de la vida social sin problemas y alcanzar su propio bienestar”, explica la psiquiatra Rosario Martínez

La especialista afirma que las personas al nacer tienen un sexo, un grupo familiar, costumbres sociales y éstas son las que determinan ciertas conductas a través de su vida. No es lo mismo ser varón o mujer, haber nacido hace 50 años que 10, ser el hijo mayor o menor, ser pobre o rico, ese equilibrio se busca a través de la salud mental.

“La psiquiatría es la ciencia que trata las enfermedades mentales y el funcionamiento cerebral, y el especialista atiende y entiende las conductas que pueden ayudar a modificar, a través de elementos externos e internos como la farmacología, que puede cambiar las relaciones del sujeto con su medio”, dice Martínez. Otra de las herramientas que utiliza la psiquiatra para tratar algunas patologias es la psicología, una rama que estudia el comportamiento a través de técnicas, métodos y formas de manera externa.

Según la psiquiata, afortunadamente, en Bolivia la salud mental ha tenido una evolución, pues antes primaba el desconocimiento, así como los beneficios de su aplicación en la población, a diferencia de otros países desarrollados que desde siempre, han reconocido que la salud mental es uno de los pilares fundamentales de la salud y del desarrollo de los pueblos.

FACTORES

Según la especialista, existen factores biológicos que pueden alterar la salud mental, por ejemplo, si alguien sufre un accidente y pierde la movilidad de algunos de sus miembros hace que dicho incidente modifique las respuestas psicológicas y sociales del individuo y la adaptación a su trabajo, por ejemplo, porque tiene cierta dificultad para su traslado e incluso descuido en su propio aseo personal, entre otros aspectos.

También están los factores psicológicos como la violencia contra una persona que vive en un ambiente depresivo, porque sufre maltrato físico y psicológico. Entonces, el cerebro no sabe cómo acomodarse a estas situaciones y reacciona con decaimiento, sensación de fatiga, necesidad de descanso, porque nunca siente que su sueño es reparador.

PADECIMIENTOS

Las patologías son distintas de acuerdo con la edad en la que se presentan ya sea en la niñez, adolescencia o adultez, si son varones o mujeres. Las más frecuentes en niños son el Transtorno de Deficit de Atención e Hiperactividad, que es un trastorno del neurodesarrollo que se genera desde el vientre materno, produce grandes dificultades en su escolaridad y muchas veces no lograr concluir con sus estudios básicos.

“En las niñas se ve una mayor cantidad de cuadros ansiosos secundarios debido a los roles que desempeñan en el colegio, en el curso y en la familia que son en algunos casos prohibitivos. Entonces comienzan a morderse las uñas, a rasgarse y cuando son adolescentes el cutting es frecuente. Y el bullying que está trayendo a muchos niños a consulta”, recuerda la psiquiatra.

Martínez enfatiza que en la mujer adulta hay más casos de secuelas de violencia intrafamiliar y son comunes los cuadros depresivos. En los varones los trastornos ansiosos como los obsesivos compulsivos son frecuentes, así como los psicóticos, que afectan tanto a hombres como a mujeres.

“El psicótico es aquel que pierde el contacto con la realidad, deja de ser consciente de lo que pasa, por ejemplo, en la esquizofrenia lo que hace la persona es vivir una vida de autista, porque tiene introversión, recibe estímulos internos de voces y comandos que le viene de su mente y no tiene relación con el mundo exterior. Camina descuidado, no tiene amistades, se pierde en lo laboral y social”, dice la psiquiatra.

CAUSAS

Cada enfermedad tiene sus particularidades, en algunas pueden incidir las causas genéticas, psicológicas o sociales, entre las primeras se corre mayor probabilidad de adquirir la patología si alguno de los padres tiene un trastorno psicótico.

Por ejemplo en el caso del Trastorno de Déficit de Atención e Hiperactividad pasa de una generación a otra, pero no es en la misma proporción e intensidad. Los trastornos bipolares también son frecuentes en familias con pacientes con esquizofrenia, porque se trata de enfermedades con mucha cercanía.

PREVENCIÓN

La profesional en salud afirma como algo positivo que cada vez son más los profesores que entienden el TDH y recomienda a los padres de familia que necesitan acudir a un especialista para tratar este problema.

A diferencia de otros sectores que no tienen que ver con la salud y la educación, todavía existe una negativa bastante importante de visitar al psiquiatra. Las charlas que se realizan en colegios, comunidades u otros espacios son ideales para dar información útil.

Es importante la visita, por lo menos una vez al año al especialista, para una evaluación sobre la salud mental de cada individuo, independientemente de cómo se encuentre su salud física. Esta debería ser una regla a seguir en todas las edades.