Tu sonrisa interior

Existe un ejercicio taoísta enseñado por el maestro Mantak Chia en su libro “Sistemas taoístas para transformar el estrés en vitalidad”, que consiste en una meditación en la que, con el cuerpo relajado y los ojos cerrados procedemos a sonreír a nuestras partes corporales llenas de incomodidad, de fatiga o de molestia interior.

Si la energía de un ambiente es negativa o desagradable le puedes sonreír también pegando la lengua al paladar y de forma sutil, la energía del ambiente cambiará.

Puedes comenzar a practicar este ejercicio con la energía de tu propio dormitorio y podrás probar si es cierto.

Puedes sonreírle a cualquier parte de tu cuerpo que lo sientas cansado, incomodo. Debes perseverar cuando menos dos semanas, ya entonces podrás notar los agradables efectos.

Yo le sonrío a mi cabeza, a mi oído izquierdo, a mi abdomen, a mi cuello y a las plantas de mis pies y siento un alivio sorprendente.

Existe un aspecto especial de este poderoso ejercicio: puedes sonreírle a un problema que te esté causando preocupación y a continuación debes crear un cuadro mental que represente el problema resuelto y solucionado. Debes imaginar una escena que simbolice el problema resuelto y una vez lograda la imagen en la pantalla mental, debes sonreírle también, si lo haces de la mejor manera, tu mente subconsciente entenderá el mensaje y tu solución requerida se producirá.