Apolo está desprotegida y al acecho de los delincuentes

“Es una conducta repetida y que se da cada cierto tiempo”, dijo el viceministro de Régimen Interior, Jorge Pérez, al referirse al asalto de los buses en Apolo y a la falta de control de la Policía, porque esa zona se encuentra muy alejada de La Paz y muy cerca de la frontera con el Perú.

De acuerdo con las tres hipótesis que maneja Inteligencia de la Policía, el grupo armado podría estar integrado por bolivianos y posee armamento pesado y son grupos avezados que actúan con capuchas. La segunda hipótesis apunta a un grupo que pasó la frontera y llegó a Bolivia para cometer las fechorías y, la tercera hipótesis señala a un grupo organizado en la que incluso están personas de estas comunidades que conocen el movimiento económico y saben qué tipo de vehículos conducen oro y dinero.

Pérez admitió que es difícil controlar este circuito. “No rehuimos nuestras responsabilidades. Hay determinadas zonas a las que es difícil llegar por la distancia y las complicaciones geográficas”, dijo.

Según las primeras investigaciones de la Policía, se advirtió violencia en el hecho, porque redujeron a los pasajeros, los requisaron y los metieron en las bodegas del bus.

Las autoridades de Gobierno tomaron contacto con la Embajada de Perú cuya representante prometió amplia colaboración y de inmediato se hizo un rastrillaje por la región.

Al referirse a otro tipo de atracos que se hizo en oportunidades anteriores, también se utilizaron motocicletas y cuadrotracks, de manera que estos grupos son avezados.

El equipo de inteligencia de la Policía fue hasta el lugar para dialogar con los pobladores, la mayoría de los cuales se mostró reticente a brindar información, lo que refleja un clima de miedo.

Este hecho lo corroboró el asambleísta de Apolo Víctor León, para quien la falta de seguridad se debe en gran manera a la carencia de apoyo del Gobierno, pese a las reuniones sostenidas para tratar este tema.