Denunciado por violación mató a su hijo de tres años

Un sujeto con oficio de panadero fue aprehendido ayer en el Hospital La Paz, en la zona Garita de Lima, al ser atendido por intentar ahorcarse, luego de asesinar a su hijo de tres años, con agujetas de zapato. El reporte policial señala que el sujeto está denunciado por violación de otra menor de 15 años.

El lamentable hecho fue reportado por el director de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (Felcc) de La Paz, coronel Johnny Aguilera, quien aseveró que el sujeto de 24 años, identificado como Wilmer F. L., justificó su accionar señalando que existe una denuncia por violación en su contra, y para evitar que su hijo viva con la vergüenza de tener a su padre en la cárcel, decidió quitarle la vida, con unas agujetas de zapato y luego con el cordón de la chamarra del menor trató de ahorcarse.

El informe médico señala que el niño llegó ya sin vida cerca de las 09.14 horas, junto al progenitor, a quien también se auxilió luego de que se frustró su intento de suicidio.

El sujeto vivía separado de la madre del menor y compartían la custodia del hijo, haciéndose cargo él del menor los fines de semana.

La mañana de este lunes, cerca de la 06.30 horas, Wilmer F. L. realizó una llamada a su exsuegra y le dijo que había matado a su hijo y que quería despedirse de su expareja, porque también se iba a quitar la vida.

“No lloren, me ofrecí a Dios como ofrenda para que mi familia no sufra”, dice en la nota póstuma que el sujeto dejó escrita y fue hallada por los investigadores.

El hecho se registró en la zona el Tejar y de ahí el caso pasó al Centro Médico. En el operativo, también se detuvo a la madre del sujeto, quien, al igual que el padre, intentó justificar el asesinato del menor.

Ambos, el padre y la abuela del niño señalaron que el menor estaba descuidado, y que la pareja no tenía una buena relación, por lo que estaban separados. En horas de la tarde, la madre del sujeto con el rostro golpeado fue conducida a declarar a la Fiscalía.

El coronel Aguilera informó que Wilmer F. L. tiene en su contra, una denuncia por la violación a una adolescente de 15 años y que en los próximos días iba a llevarse a cabo su audiencia cautelar. La denuncia fue hecha por los clientes del sujeto.

En una primera instancia, Wilmer aseguró que le quitó la vida a su hijo con las manos, pero los médicos del Hospital La Paz afirmaron que eran evidentes las marcas de una cuerda en el cuello del pequeño.

La directora de la Defensoría de la Niñez y Adolescencia de La Paz, Consuelo Torrez, en contacto con EL DIARIO, informó que el caso es investigado por infanticidio, que tiene una pena de 30 años de cárcel, por ser la peor forma de violencia hacia los niños.

Sobre la situación de la pareja, explicó que los padres del niño habían llegado a un acuerdo privado de asistencia familiar, por el cual Wilmer F. L. se comprometía a pagar 500 bolivianos para la manutención de su hijo.

Hasta el cierre de edición de esta nota, el cuerpo del menor aún se encontraba en la morgue para la autopsia de ley.

BEBÉ CALCINADO

Este sería el segundo caso de infanticidio que se registra en La Paz en las últimas semanas.

El miércoles 16 de agosto, los restos de una bebé, de un mes y medio de nacida, fueron encontrados calcinados al interior de un basurero de la calle Héroes del Pacífico, en la misma zona.

La secretaria de Desarrollo Social de la Alcaldía, Rosmery Acarapi, informó que se había logrado ya identificar a la madre del bebé y que la muerte de este, por un golpe en la cabeza, se debió al descuido en su cuidado y que, a fin de no dejar rastros, también fue quien decidió quemar los restos.

Estos fueron encontrados al interior de dos bolsas de plástico negras y por las quemaduras de los restos no se puede establecer ni el sexo ni colectar la impresión de las palmas de las manos y plantas de los pies, que ayudarían a identificar al neonato.