Una temporada inusual

Al final de una temporada tormentosa, el Arsenal del francés Arsene Wegner ve cada vez más cerca su billete para la próxima Liga de Campeones, tras sumar ayer un punto frente al modesto Stoke (1-1).

A pesar del empate, Wenger respiró más tranquilo tras la jornada de ayer, al comprobar que el 1-1 en el Britannia Stadium significaba un nuevo paso adelante para terminar terceros, un desenlace que los seguidores “gunner” no podían soñar cuando el equipo rozaba los puestos de descenso a principios de temporada y el puesto del técnico francés estaba en entredicho jornada tras jornada.

Gracias al delantero holandés, Robin Van persie, que remató un pase cruzado del checo Tomas Rosicky al cuarto de hora de juego, el Arsenal pudo equilibrar un marcador que el Stoke había decantado a su favor en el minuto nueve por medio de un cabezazo del inglés del inglés Peter Crouch, que hizo valer sus casi dos metros para saltar por encima de los defensores “gunner”.

En el DW Stadium, el Newcastle no tuvo opciones ante un Wigan obligado a arañar tres puntos para alcanzar la zona de salvación, y en el descanso ya había cosechado los cuatro goles que le enviaron de vuelta a casa preocupados por lo que pueda hacer hoy ante el Blackburn el Tottenham, tres puntos por detrás de ellos.

La jornada se cerró en Carrow Road, donde el Liverpool llegaba dispuesto a acumular moral para la trascendental final de la Copa de Inglaterra que disputará el próximo 5 de mayo frente al Chelsea.

El uruguayo Luis Suárez se encargó de liderar al equipo al sellar un triplete ante un Norwich que no se jugaba nada y firmó desde el centro del campo uno de los tantos más vistosos de la temporada en Inglaterra.