Se culpan mutuamente

Primer día de huelga de la COB deja un saldo de siete heridos

Los manifestantes intentaron ingresar a la Plaza Murillo por las cuatro esquinas y la Policía defendió su posición con gases y chorros de agua, en algunos casos con excesos, como no lo hace en otras circunstancias.

Los manifestantes se ponen a buen recaudO mientras la Policía lanza gases. Algunos sectores volvieron a lanzar cachorros de dinamita. En la calle Ballivián la institución del orden hizo valer su fuerza ante los reclamos verbales de los estudiantes.

El intercambio de gases y cachorros de dinamita entre manifestantes de la Central Obrera Boliviana (COB) y la Policía dejó al menos siete heridos tras el choque protagonizado al mediodía de ayer en cercanías de la Plaza Murillo.

De acuerdo con la versión del viceministro de Régimen Interior y Policía, Jorge Pérez, de los siete heridos, cinco son policías, entre los que se encuentra el comandante de la Unidad Táctica de Operaciones Policiales (UTOP), coronel Julio Cruz, dos coroneles y dos uniformados de baja graduación; además fueron afectados el reportero gráfico Julio Lazo y un médico.

La Policía, para contener el asedio de los trabajadores y universitarios movilizó el vehículo antidisturbios Neptuno, así como también a efectivos del Grupo Especial Pumas, UTOP y uniformados del PAC a bordo de motocicletas, quienes usaron agentes químicos para dispersar a los manifestantes, medida que afectó a peatones, escolares y padres de familia.

La protesta en inmediaciones de Plaza Murillo alcanzó su nivel más alto entre las 12.50 hasta las 13.40 horas, cuando los trabajadores en salud, estudiantes y la COB estuvieron a punto de romper el cerco policial en demanda de la derogación del Decreto Supremo 1126.