Con una misa recordaron a Patricia Flores

Reconfortada por la condena de Odón Mendoza por la vejación y muerte de su hija, Patricia, hace 15 años, Martha Velásquez madre de la malograda niña, le rindió ayer un homenaje en su memoria con una misa realizada en la Catedral Metropolitana de La Paz.

La gestora para que el caso haya culminado con una sentencia es Paola Barriga, la aboga de la familia quien por el lapso de tres años estuvo liderando una nueva investigación contra un caso que consideró “atroz” por la forma en cómo fue asesinada la niña Patricia.

“Estamos conmemorando los 15 años de la pérdida de Patricia, este horrendo crimen ha sido investigado desde ese entonces y por fortuna, para este día, ya contamos con una sentencia condenatoria, nos da para seguir adelante”, declaró Barriga al término de la misa.

A la misa que se dio al mediodía de ayer, asistieron alumnos de la escuela Juariste Eguino, representantes del Defensor del Pueblo, Centro de Información y Desarrollo de la Mujer (Cidem), la Defensoría de la Niñez, a los cuales la familia entregó reconocimientos, al igual que a quienes colaboraron en la investigación y el seguimiento del caso, siendo la principal, Paola Barriga.

“FUNDACIÓN PATRICIA”

Sin dejar de lado el terrible vacío que dejó Patricia, sus hermanas Claudia y Maricielo Flores, entre emoción y satisfacción, entregaron como parte de un homenaje a su madre Marta Velásquez, la personería jurídica de la Fundación Patricia Flores, que una vez que cuente con una sede, trabajará en defensa de niños que víctimas de maltratos y agresiones sexuales.

APELACIÓN

La abogada de la familia, Paola Barriga, informó además que hoy se tiene previsto presentar la apelación para ampliar la condena de las porteras Margarita Uzeda y Berna Porcel, además de la directora Dora María Vargas, de la escuela Juariste Eguino donde estudiaba la niña Patricia, por incumplimiento de deberes, encubrimiento y la complicidad con el autor sentenciado, Odón Mendoza.

Recordemos que el cuerpo sin vida de la niña Patricia estuvo cerca de cuatro días en uno de los depósitos del establecimiento, sin que haya sido percibido por estas personas, que en el caso de las porteras tenían su vivienda a escasos metros del lugar.