Ucrania

Frágil alto el fuego prorroga retiro de armamento pesado

Ambos bandos en conflicto se acusan mutuamente de no respetar la tregua pactada.


Soldados ucranianos a bordo de un transporte militar. La tregua acordada pende de un hilo, aunque los pasados días continuaron los combates en la zona de conflicto.

Kiev.- El frágil alto el fuego en el este de Ucrania retrasa la retirada del armamento pesado, el segundo punto de los acuerdos de paz de Minsk, y aplaza el arreglo político del conflicto.

“La primera fase de los acuerdos de paz es el completo alto el fuego. Tan pronto como los terroristas (rebeldes pro rusos) dejen de atacar nuestras posiciones, cumpliremos el segundo punto”, dijo ayer Anatoli Stelmaj, portavoz del Ejército ucraniano, en rueda de prensa.

Según el mando militar, “en estos momentos no se da un completo alto el fuego”, ya que los rebeldes prosiguen su ofensiva, ahora en la zona del puerto de Mariúpol, punto clave para abrir un corredor entre la frontera rusa y la península de Crimea, informó Efe.

Cerca de dos soldados ucranianos y otros diez resultaron heridos entre el domingo y la madrugada de ayer en combates con las milicias pro rusas pese a la tregua en vigor desde el 15 de febrero pasado.

Según medios locales, los dos militares murieron en la localidad de Shirókino, a 23 kilómetros del Mariúpol (mar de Azov), sede del Gobierno regional leal a Kiev desde la inicio de la sublevación armada contra Kiev en abril del pasado año.

Ucrania acusó el domingo a los rebeldes de lanzar un ataque con tanques, artillería y mortero contra las posiciones gubernamentales en esa localidad, cruentos combates que continuaron, ayer, según medios rusos y ucranianos.

Un portavoz de la autoproclamada república popular de Donetsk reconoció los combates y explicó que la mitad de Shirókino está controlada por las milicias y la otra, por el batallón gubernamental de voluntarios “Azov”.

Esto ocurrió después que los separatistas dieran por terminadas las hostilidades en la región de Donetsk y aseguraran que el frente se ha estabilizado.

Kiev acusa a las milicias separatistas de aprovechar la tregua para hacer acopio de municiones y reagrupar sus fuerzas, pero los analistas descartan un ataque contra Mariúpol y creen que se trata de movimientos tácticos para mejorar posiciones en caso de que fracase el proceso de paz.

Mientras, los insurgentes acusaron a las fuerzas gubernamentales de provocaciones en las inmediaciones de Donetsk y en la vecina Lugansk, sus principales plazas fuertes.

 
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