Feria del Libro será ampliada el año próximo

De acuerdo con la organización de la Feria Internacional del Libro (FIL) de La Paz, este año se cumplieron las expectativas en cuanto al número de visitantes y el público, sin embargo, se adelantó que para el próximo año piensan ampliar la feria y ocupar no sólo el bloque amarillo sino también el bloque verde del campo Ferial Chuquiago Marka. Esto con el objetivo de mayores expositores, actividades y espacio para los niños y jóvenes.

Según Patricia Navarro, gerente de la Cámara Departamental del Libro, este año la ampliación de espacio (del bloque rojo al bloque amarillo) hizo que hubiera mayor espacio en cuanto a salas de conferencia o lugares de gastronomía. Esto permitió desarrollar las actividades y brindar al expositor y al visitante más comodidad. “Ese, creo, ha sido el mayor obstáculo de la feria, que ha ido ambientando lugares y en esta oportunidad ese no fue un inconveniente como en otros años, sin embargo estamos evaluando la posibilidad de que el próximo año la feria se amplié en lo que será el segundo piso del bloque verde para una mejor interacción con los visitantes”.

Agregó: “Creemos que esta versión, al igual que en las otras se ha conseguido muchos logros, porque hubo un crecimiento importante en la producción editorial, hemos incentivado a la lectura, promovemos al libro legal e impulsamos el desarrollo cultural y literario de nuestro país. Entonces nos sentimos muy felices”.

En cuanto a la población en general hubo quejas no sólo en cuanto a precios se refiere pues coincidían que los libros tenían precios elevados, la mayoría el doble del original.

Esto fue justificado por el presidente interino de la Cámara Departamental del Libro, Carlos Ostermann, quien refirió que los libros nacionales están en un buen precio, alrededor de 60, 80 y 100 bolivianos, pero el libro que se trae como novedad de afuera es cara aunque resaltó que si no hubiera la Ley del Libro, los textos costarían más.

Además, que algunos se rigen por el 10 por ciento de descuento, sin embargo esto es algo que no pueden regularizar.

En un rescate de opiniones Wilmer Urrelo dijo que si bien estos son espacios para incentivar la lectura, uno no debe esperar la feria una vez al año para adquirir libros, pues no hay diferencia de precios en la feria como en las librerías.

“Yo no compro habitualmente en la Feria del Libro, porque son caros y además no hay la literatura que realmente me interesa. Los cambios de una librería en un día normal a un día de feria no es muy considerable, el precio sigue siendo el mismo. El más barato te cuenta 50 bolivianos y va por ahí. Entonces son precios internacionales esos. He ido a ferias de otros países y más o menos son los mismos. Entonces me parece que no está funcionando mucho la dichosa Ley del Libro” explicó en una pasada entrevista.

La evaluación que le hicieron los expertos a esta fiesta cultural fue la presencia masiva de jóvenes y niños, quienes abarrotaron el campo ferial, principalmente por las mañanas, para recorrer los stands y hacer anotaciones como parte de una tarea, preguntar a los expositores detalles y precios de libros para regresar después con sus padres, fue una actividad positiva de involucrar a los más jóvenes de la casa al mundo de las letras.

La evaluación general se la hará en esta semana, pues hasta ayer, los organizadores de la vigésima versión de la Feria Internacional del Libro realizaban la entrega del espacio.