No se responsabilizarán de delitos “imposibles”

El ministro de Justicia y Transparencia, Héctor Arce Zaconeta, anteriormente declaró que las acusaciones de robo, contrabando y porte ilegal de armas que hace Chile contra nueve bolivianos se trata de “delitos imposibles”, por los cuales no pueden ser juzgados.

En esa línea, el titular de la Presidencia, René Martínez, insistió en que los nueve bolivianos detenidos actualmente en el penal de Alto Hospicio, de Tarapacá, deben salir en libertad lo más antes posible porque se encuentran injustamente recluidos.

Señaló que el 19 de marzo, cuando los dos militares y siete funcionarios de la Aduana Nacional de Bolivia realizaban tareas cotidianas de lucha contra el contrabando en la frontera con Chile, fueron detenidos por carabineros y llevados a estrados judiciales chilenos, cuando este tema debió resolverse por la vía diplomática.

A nivel internacional, diferentes organizaciones se manifestaron en favor de los nueve bolivianos detenidos y solicitaron al Gobierno de Chile liberarlos porque no cometieron delito alguno. En Bolivia también hubo hasta movilizaciones de los familiares.

Después, en mayo, el ministro de Relaciones Exteriores de Chile, Heraldo Muñoz, explicó sobre la posibilidad de que los nueve bolivianos puedan ser sometidos a un juicio abreviado, que permita su excarcelación o libertad.

Sin embargo, hasta la fecha no se conoce una posición oficial de la defensa de los nueve bolivianos ni de las autoridades nacionales. Anteriormente, el ministro de Justicia y Transparencia, Héctor Arce Zaconeta, declaró que el tema todavía estaba en análisis.

Sin embargo, Arce aclaró que los connacionales no se declararán culpables de algún delito que no cometieron.

La justicia chilena los acusa a los dos militares y siete trabajadores de la Aduana Nacional de robo, contrabando y porte de armas.

Recientemente, Sara Rada, madre de uno de los nueve bolivianos detenidos, dijo que los connacionales podrían aceptar haber pisado suelo chileno mientras desarrollaban su lucha contra el contrabando, pero jamás se declararían culpables de los tres delitos que se los acusa.