Doria Medina cuestiona falta de control en YPFB

El caso de corrupción expuesta en Yacimiento Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) demuestra que no existe control desde el Gobierno central sobre las acciones y contrataciones que se realizan en la empresa, especialmente con los antecedentes de hechos ilícitos como sucedió en 2009 con el caso de Santos Ramírez.

Para el líder de Unidad Nacional (UN) Samuel Doria Medina, el manejo en YPFB representa un serio riesgo para las arcas del Estado nacional, porque son constantes las denuncias de corrupción que no son atendidas a tiempo. “Sabemos que YPFB es la niña de sus ojos del presidente Evo Morales, pero lo que hay que preguntar es quién fiscaliza o quién controla las contrataciones, las licitaciones, porque ya hubo el caso Santos Ramírez I y esto debe llamar la atención”, dijo.

Un hecho de tránsito derivó en la investigación al exgerente de las Plantas Separadoras de Líquidos de la Corporación, Gerson Rojas, quien sería el principal implicado en la presunta firma de contratos lesivos al Estado. Asimismo, se le vincula con la contratación irregular de una funcionaria, por relación sentimental, quien pese a no ser ingeniera ocupó un cargo en la petrolera con un sueldo de Bs 10 mil. La hermana de la enamorada de Rojas, de apellido Avilés Méndez , es supervisora de Medioambiente de Astra Evangelista S.A. con lo que se corroboraría esta figura de tráfico de influencias.

Denuncias dentro de la petrolera hablan de salarios superiores incluso al del Presidente del Estado y contrataciones que se ha solicitado investigar al Ministerio Público y Ministerio de Transparencia.