Los beneficios de la industria de la droga

Los datos estadísticos y numéricos que proporciona la Fuerza Especial de Lucha contra el Narcotráfico (Felcn) son cada día más asombrosos y revelan que los esfuerzos que hace el Gobierno para evitar la producción de drogas resultan menos efectivos, lo que querría decir que a más interés de las autoridades, la industria clandestina e ilegal de drogas está ganando nuevas batallas y que no tardará en afirmar que ha ganado la guerra.

El 4 de noviembre pasado la Felcn informó haber descubierto una fábrica de droga en el norte de Santa Cruz, cuya producción era de ¡cien kilos de cocaína pura al día!, lo que supera los más pesimistas análisis tanto de entidades nacionales como internacionales.

El hecho de que se hubiese encontrado una fábrica que estaba produciendo tanta cocaína al día supera los esfuerzos de la imaginación más calenturienta. Esa factoría estaría produciendo esa fantástica cantidad de droga desde hace tiempo, lo que significaría nada menos que ¡tres toneladas de cocaína al mes!, lo cual a la vez querría decir que su producción anual sería de 36 toneladas al año.

Se puede colegir que esa no sería la única fábrica que produce la “diosa blanca”, sino que esa actividad la estarían realizando otras diez o más fábricas de esa naturaleza. Esas deducciones significarían que la producción de cocaína en las regiones orientales podría llegar a 500 toneladas al año. Confirmando esas apreciaciones la Felcn informó también el 4 de noviembre haber realizado, entre otros, dos operativos en el norte de La Paz y el Alto, donde fueron incautados 400 kilos más de droga (casi media tonelada).

Las informaciones acerca del desarrollo de la industria de la droga aumentan porque por Bolivia pasa gran cantidad de droga de origen peruano con destino a Brasil, Argentina, Ecuador, Panamá y Venezuela y de allí a América del Norte y Europa, hecho que confirma que crece la condición de Bolivia como país “agro-extractivo” para beneficio de cárteles extranjeros y pauperización local.

Si se calcula (en los términos más optimistas) que el kilo de cocaína se vende en el mercado consumidor final en alrededor de veinte mil dólares-kilo, sería posible concluir que el producto total anual de 400 toneladas (o sea 400.000 kilos) podría sobrepasar fácilmente los 8 millones de dólares, suma apreciable de la cual alrededor del 10 por ciento quedaría en el país en el peor de los casos, o sea que para los productores nativos no existen las ventajas que se piensa algunas veces.