Anticipos del Mensaje Presidencial

En cumplimiento de su trabajo periodístico que yo le había encomendado, la fiel reportera cochabambina se mueve cual laboriosa hormiguita dentro del entorno que rodea al presidente Evo, quien hoy se apresta por enésima vez a rendir cuentas de su labor presidencial ejecutada durante los últimos doce meses.

Mi corresponsal palaciega que llegó a Trinidad en medio de renombrados colaboradores del señor Morales en el Palacio de Gobierno y en el Palacio Legislativo, ya se ha convertido en una figura cuasi palaciega, pues conversa con todos acerca del desarrollo de los actos que se desarrollan en la capital del Beni, donde sencillos habitantes miran y observan a los personajes oficiales cual si éstos fueran personajes extra planetarios dotados de cerebros privilegiados.

Esta mañana, la cochabambina me sorprendió cuando me informó que uno de los ministros de Evo se acercó al mandatario y le entregó un folder que contenía muchas hojas de papel, escritas con pulcritud y subrayadas para que el orador presidencial las leyera convenientemente, u omitiera algunos párrafos considerados como inconvenientes, políticamente hablando.

Mi habilísima reportera me confesó que logró tener entre sus manitas el material de referencia y que podría informarme acerca de su contenido, entre los cuales el presidente Evo había subrayado para darles mayor énfasis en su lectura.

Sorprendido y emocionado ante tal primicia periodística, rogué a mi comadritay que me los hiciera conocer de inmediato para brindar una satisfacción a los lectores de esta columna periodística, y Macacha leyó para mí los renglones más importantes del discurso-informe presidencial de Evo. He aquí los más interesantes: “Debo informar al país que el autor del viaje de nuestro hermano, el Papa Francisco, soy yo, pues convencí al Pontífice de que nuestro gobierno es tan católico como nuestro pueblo y mis actos responden a la actual política social del Papa”.

Otro párrafo que subrayará el presidente Evo es su decisión personal para conseguir que la competencia Dakar se corriera en parte de los caminos de nuestra patria, para así promover a Bolivia, aunque tal hecho costase a Bolivia varios millones de dólares anualmente.

En otro párrafo de su discurso, nuestro presidente Evo hablará como hazaña propia de la realización de la reunión de Santa Cruz-Bolivia de los G-77 más China, confesando que ese evento costó a Bolivia muchos millones de dólares por pasajes, alojamiento, y regalos de joyas a los invitados y delegados.

Eso y otras cosas más nos dirá hoy nuestro presidente Evo, quien discretamente callará su propia decisión de continuar siendo Presidente hasta que las velas no ardan, o sea per sécula seculorum, amén.