Mitomanía

La estructura socialista-populista-capitalista, que se subsume en un pragmatismo “desarrollista”, ahora pretende una reforma del Art. 168 de la CPE para sus re-re-re, sabedores de que no han honrado muchas “promesas” como: salud, trabajo y educación, excepto “mega-obras” que “sirven” a los ricos y clase media alta. Machaconamente, mediante actitudes mitómanas “ofrecen” mega-obras (tren bioceánico, centros de energía, extradición de Goni, etc.) para favorecer su SÍ.

Según Antón Delbruek, la mitomanía implica mentiras recurrentes de alguien (que se cree) increíblemente valiente, sabio, etc., que se empecina en “obras” que pese a su exigua utilidad, los “ejecuta”. Noam Chomsky aduce que ofrecer algo sabiendo que no se puede cumplir o no quiere el pueblo, es igual a mentir. Por ello, el Poder difunde mensajes “confusos” mostrando: bonanza, pobreza, desarrollismo y asistencialismo neoliberal. Esta es la constante que durante una década convalidó la mitomanía confrontacionista.

El Poder no ha cumplido cruciales promesas, excepto alguna “fragmentación social” al privilegiar (cooptar) a grupos corporativos, postergando a los demás bolivianos. La salud continúa siendo un privilegio de pocos, mientras el pueblo tiene que hacer filas a las cuatro de la madruga por una “ficha de consulta”, poniendo en riesgo su vida ante la inseguridad ciudadana. La salud privada al margen de su alto costo, “orgullosa” vilipendia a los enfermos, ¡no hay quién los defienda! La justicia ha terminado peor que antes, azuzada por una elección de magistrados a la que el pueblo dijo NO. El DS 21.060 (de Goni) sigue vigente y “mejor”, ¿de qué ha servido la derogación del Art. 55? Los trabajadores eventuales continúan (¿acaso después de tres contratos no pasaban a ser de planta?). La carga laboral es de 12 horas, con exiguos salarios de 1.200 Bs y sin las mínimas condiciones laborales (Cedla/I/16). La informalidad, en 10 años, se incrementó de un 34% al 83% de la PEA.

El Ministerio de Economía y Finanzas confirma que la venta de comida rápida –cuyos impuestos no es regular- de 67 MM $us (2005) ha pasado a 635 MM $us (2014) con un incrementó de 853%. La cooptación de funcionarios públicos (muchos improvisados) en desmedro de miles de –competentes- profesionales fue para reforzar el paternalismo racista del Poder. Suplantó al indígena con neo y para indígenas (llunkus) que han “desviado” 1,342 MM de Bs. del Fondioc, ahora difuminado -al igual que el Terrorismo I y II.

Se endilga a “dirigentes” (¿cuáles movimientos sociales?) el rango de pueblo y dueños de la democracia. La Ley 045, por sus resultados (políticos) penaliza el pensamiento crítico, coarta la libertad de expresión. En el campo de la educación, la ley 070 sigue “coja”: se dijo no más reprobados y padres de familia hacen huelga por sus hijos reprobados (¡una vergüenza!). Ante el “chenko” de las inscripciones se improvisa “sorteos” de cupos, “jugando” con el futuro de los educandos. Ello prueba que el gasto en canchas y coliseos debía haber sido en unidades educativas. Profesionales (universitarios) no pueden impartir docencia en primaria o secundaria, pues se les exige un curso de Profocom, lo que devalúa sus competencias. El transporte sigue caótico pese a los teleféricos.

Citar más ejemplos es vano. ¿Qué ha sucedido? Que mitómanos (coloniales) se han desbordado. Como sea, el régimen populista-capitalista tiene cuatro años para enmendar estas taras, pues la pugna entre el NO o el SÍ es irrelevante, ¡ya está decidido!

El autor es Director del Centro de Investigación, Servicios Educativos y de Comunicación (CISEC).