Corea del Norte y sus rencores contra EEUU


 

El dictador de Corea del Norte está empeñado en desencadenar una guerra en contra de los Estados Unidos y, además, con la finalidad de “unificar su país con la anexión de Corea del Sur” y anexarla al régimen comunista que rige en detrimento de su mismo pueblo. Convencido de los grandes avances en crecimiento y desarrollo de Corea del Sur, desde la conclusión de la guerra el año 1953 con el armisticio firmado en Pan Mun Jon, los gobiernos tiránicos encabezados por Kim Il Sung (abuelo del actual dictador) las incursiones sobre territorios del sur han sido permanentes.

Las políticas desarrolladas por el régimen comunista, apoyado por China y Rusia, en contra de los Estados Unidos y Corea del Sur han sido permanentes y, según estudiosos norteamericanos, se deben a rencores que se tiene en Corea del Norte por los bombardeos norteamericanos durante la guerra de 1950 a 1953. El régimen comunista se ha encargado de adoctrinar al pueblo en contra de los Estados Unidos, recordando los bombardeos y matanzas producidas durante la guerra. Adoctrinar al pueblo ha sido labor fundamental de los sistemas propagandísticos del gobierno y el pueblo, por generaciones, ha vivido resentido y hasta juramentado para combatir a Estados Unidos y Corea del Sur.

El dictador norcoreano ha lanzado muchos misiles e inclusive habría experimentado con artefactos nucleares que, según los expertos, tendrían como finalidad llegar a los Estados Unidos, al Japón y Corea del Sur. Organizaciones internacionales como Naciones Unidas y otras han prevenido al régimen comunista para que se abstenga de políticas destinadas a iniciar una guerra que tendría graves consecuencias, mucho más si se utiliza artefactos nucleares de largo alcance como anunció varias veces el dictador norcoreano.

Los sentimientos de revanchismo del gobierno y pueblo norcoreano tendrían su raíz antes de la guerra de 1950 por las continuas acciones terroristas del régimen de Pyongyang contra Corea del Sur con la finalidad de amedrentar al pueblo para que se una a Corea del Norte. Las acciones del tirano Kim Il Sung fueron apoyadas en su momento por José Stalin y la China Roja y ese apoyo fue contundente porque hizo crecer la industria armamentista de Corea del Norte, al extremo de haber alcanzado altas técnicas e infraestructura para armas nucleares. En su momento, ni Stalin ni Mao Tse Tung siquiera habrán pensado que su apoyo y ayuda al régimen de Pyongyang llegaría a ser un peligro no solamente para los países a los que guarda rencor, sino para ellos mismos, porque el uso de armas nucleares implica grave peligro para todo el mundo.

Estados Unidos, conjuntamente Naciones Unidas, Japón y Corea del Sur tienen que estudiar caminos que permitan la superación de un conflicto que es causa de viejos rencores por una guerra que prácticamente se promovió por cuestiones de hegemonía que caracterizó a los regímenes comunistas que buscan tener dominio sobre todo el mundo.

 
Revistas

Usurpado el 7 de octubre de 1970, por defender
la libertad y la justicia.
Reinició sus ediciones el primero de septiembre de 1971.

EL DIARIO
Decano de la Prensa Nacional
Miembro de la Sociedad Interamericana de Prensa y la Asociación Nacional de Prensa.

Dirección:

Antonio Carrasco Guzmán
Presidente del Consejo de Administración

Jorge Carrasco Guzmán
Gerente General

Rodrigo Ticona Espinoza
Jefe de Redacción

"La prensa hace luz en las tinieblas
y todo cuanto existe de progreso en el mundo
se debe a su inagotable labor"...

JOSÉ CARRASCO


Publicidad
Portada de HOY

JPG (853 Kb)      |       PDF (348 Kb)



Caricatura


Sociales

"SOFT MACHINE" DE KEIKO GONZÁLEZ

Lizanne Brennan, Keiko González y el encargado de Negocios de Estados Unidos, Peter Brennan.