Una dura bofetada

Guabirá agrava su crisis futbolística con la derrota (1-2) que sufrió ayer ante Real Potosí en el estadio Gilberto Parada de Montero, donde los realistas encontraron el camino despejado para llevarse una valiosa victoria en la decimotercera fecha del torneo Clausura.

Jorge Díaz tuvo una imperdonable falla que le permitió a Víctor Hugo Angola tomar la pelota y lanzar un disparo que fue el primer tanto lila a los 43‘. En el segundo tiempo habría una mejor reacción de los rojos aunque no fue suficiente pues seguían sin enviar la pelota contra el fondo de las redes.

Cristaldo depositó su esperanza de corregir los errores en la inclusión de dos delanteros, los que comenzaron el partido (Oscar Arauz, Alexis Bravo) no encontraron su lugar para atacar a Real Potosí y no representaban ninguna sorpresa a favor de Guabirá.

El segundo error de los locales fue aprovechado por Edgardo Brittes para conectar un remate de cabeza tras un servicio a los 54‘. El 0 a 2 comprometía seriamente el elenco azucarero porque sin la exactitud para definir y el orden lila que evitaba su avance la única manera de llegar al descuento era con balones parados o disparos de larga distancia.

Estos últimos encontraron a un arquero de Real Potosí bien parado, salvo un tiro de esquina que fue cabeceado por José Padilla a los 83‘. El descuento llegó tarde, restaban contados minutos para el final y la producción todavía estaba lejos de reunir la fuerza para superar a la defensa lila.

El elenco potosino sintió en menor medida las ausencias del defensor Claudio Centurión y del delantero Gerardo Yecerotte, figura destacable en la ofensiva del equipo, los reemplazantes se acoplaron al resto del equipo y el funcionamiento anduvo estable. No así en Guabirá que ya cambió de técnico y todavía no encuentra la forma de ganar, van diez fechas al hilo sin alcanzar la victoria.