Productores plantean liberar exportaciones

Productores de oleaginosas del oriente del país plantearon que el Gobierno en el marco de la Agenda Patriótica 2025 libere las exportaciones para ampliar la frontera agrícola de los cultivos y aprovechar la coyuntura internacional, que demanda cada vez más alimentos. También solicitaron nuevos mercados para diversificar la oferta que puede llegar a 3 millones de toneladas al concluir la cosecha de invierno.

SEGURIDAD ALIMENTARIA

Demetrio Pérez, presidente de la Asociación Nacional de Productores de Oleaginosas (Anapo), señaló que la demanda de alimentos aumenta a nivel internacional y paralelamente el sector se compromete a garantizar la seguridad alimentaria.

Sin embargo puntualizó que para esa finalidad se necesitan condiciones adecuadas para cumplir con ese compromiso, y uno de los primeros puntos que plantean para empezar a crecer y aumentar la producción es la liberación de las exportaciones, cuya medida es de vital importancia para ellos.

POSICIÓN OFICIAL

El viceministro de Desarrollo Rural y Tierras, Víctor Hugo Vásquez, señaló que las exportaciones de soya están liberadas aunque reconoció que siguen vigentes las licencias previas y los cupos, que en opinión de los productores impide el crecimiento del sector.

“Compartimos con el Gobierno el buen deseo de producir más y mejor, pero para ello precisamos las señales correctas y estamos dispuestos a trabajar”, enfatizó Pérez, en el foro del Instituto Boliviano de Comercio Exterior (IBCE).

ROTACIÓN DE CULTIVOS

A su vez, Jaime Hernández Zamora, gerente de Planificación de Anapo y uno de los expositores en el Foro, explicó que aparte de las 2,6 millones de toneladas de soya por cultivos de rotación, se producen otros 2 millones de toneladas en maíz, sorgo, trigo, arroz, frejol y chía.

El expositor señaló que el sector tiene cuatro demandas para aumentar la producción y garantizar la soberanía alimentaria.

La primera de ellas es la seguridad jurídica para la tierra, con ‘cero avasallamientos’ y ampliación de la evaluación de la función económica-social de dos a 5 años; asimismo, la liberación plena de las exportaciones de soya siendo que solo el 32% de la producción se destina para consumo interno; la tercera demanda se refiere al uso de biotecnología moderna a través de un marco legal regulador y el cuarto tiene que ver con el mejoramiento de la infraestructura productiva y logística de exportación.

OTROS CULTIVOS

Por otra parte, José Luis Landívar, presidente del IBCE, explicó que cuando se produce soya significa producir también otros “cultivos de rotación, como el trigo que sirve para producir el pan nuestro de cada día u otros bienes, como arroz, frejol, girasol, chía, maíz y sorgo y a partir de estos últimos, pollo y huevo, carnes y lácteos”.

De acuerdo a Hernán Zeballos, expositor central de Foro y reconocido experto en economía agrícola, la producción de soya aportó en los últimos años $us 10.000 millones a la economía nacional.

INGRESOS POR MERCADO EXTERNO

Las exportaciones de girasol y derivados reflejaron el valioso aporte de las oleaginosas en la gestión 2013 que ascendió a $us 1.300 millones por la venta de 2,5 millones de toneladas, con una composición de 22% grano; 24% aceite vegetal y 54% en harina y torta de soya. Estas cifras muestran una evolución favorable en cuanto a productos con valor agregado, según datos oficiales. Los principales destinos para las exportaciones de soya son: Colombia (56%), Perú (27%), Ecuador (10%) y Venezuela con 8%.