Cientos de familias paceñas vivieron una noche de cultura

La convocatoria de la octava Larga Noche de Museos que se desarrolló anoche tuvo una masiva respuesta que superó las expectativas de los organizadores. La ciudadanía paceña en grupos de familias y amigos visitó 92 espacios conformados por museos, galerías y teatros, además de los sitios al aire libre.

La actividad cultural que paulatinamente aumenta en concurrencia, año tras año, contó con el apoyo de más de mil personas entre policías, guardias municipales, guías culturales y funcionarios ediles que fueron desplazados en los cuatro grandes circuitos.

El anuncio oficial decía que todo iniciaría a las cinco de la tarde, pero en el centro de la ciudad, familias, grupos de amigos, incluida gran participación de turistas y personas de toda edad, comenzaron el recorrido cultural a las tres de la tarde.

En un movimiento inusitado, como pocas veces se tiene el gusto de observar, las y los paceños ocasionaron congestionamiento, con calles repletas de gente que obstruían el paso, pero esta vez en demanda de cultura.

Como era de esperarse, los museos de la histórica calle Jaén, fueron los más visitados, fue ahí donde iniciaron las grandes filas que luego se replicaron por todo el Casco Viejo, hasta repetirse en los espacios culturales de la zona sur.

El Tambo Quirquincho fue otro de los museos donde familias enteras disfrutaron de las exposiciones y de un espectáculo musical. Cuadras más abajo, el panorama no cambió.

“El año pasado hemos recibido alrededor de 17.600 personas, este año estamos viendo que serán muchas más”, detalló José Ríos, Director Ejecutivo del Museo San Francisco, mientras cientos de personas sentadas y de pie, frente a un escenario improvisado en el patio colonial, disfrutaba de la calidad de la música interpretada por Filarmónica de El Alto. A sus espaldas un dragón y dos caballeros hechos de hojalata, en tamaño natural, los custodiaban.

“Hemos preparado un viaje sensorial a través de las bellas artes, como la música, danza la fotografía, pintura, escultura, la visita a nuestro tesoro patrimonial el Convento, la basílica”, detalló Ríos a tiempo de manifestar que a esa hora, las ocho de la noche, ya habían ingresado más de 8.000 personas y tenían por delante unas cinco horas más.

Niños jalando de la mano a sus padres, parejas de enamorados buscando abrirse camino y familias entera incluidos los abuelos iluminaron su mirada a la luz de espíritu cultural que emano hasta esta madruga, la octava Larga Noche de Museos.