Alcaldía se desentiende de conflicto con extrabajadores de LPL



EXTRABAJADORES DE LPL QUEMARON SIMBÓLICAMENTE AL ALCALDE LUIS REVILLA Y LANZARON TOMATES PODRIDOS AL PALACIO CONSISTORIAL.

Extrabajadores de la operadora de aseo urbano La Paz Limpia (LPL) protestaron la mañana de este lunes lanzando huevos y tomates podridos al Palacio Consistorial y detonando cachorros de dinamita. Exigen su inmediata reincorporación como trabajadores de esa empresa, mientras que la comuna se desentiende del conflicto ante la falta de voluntad de ese sector para llegar a un acuerdo.

El director del Servicio de Regulación Municipal (Siremu), Giovanni Jemio, señaló que la comuna ha extremado todos sus esfuerzos en la búsqueda de una solución mediante la revisión de cada uno de los casos, pero que lamentablemente ese grupo en conflicto ha rechazado todas las posibles soluciones.

Jemio recordó que el pasado 11 de abril, el alcalde Luis Revilla envió una carta a la gerencia de LPL en la que se solicita “acción inmediata” para resolver el conflicto toda vez que la comuna tercerizó el servicio de aseo urbano y que los trabajadores en conflicto son su directa responsabilidad, así como garantizar el servicio.

“Esta nota ha sido enviada a la gerencia de La Paz Limpia deslindando cualquier responsabilidad (de la Alcaldía) y lamentando que se han agotado todos los esfuerzos de mediación y facilitación por parte del Gobierno Autónomo Mundial de La Paz”, enfatizó.

Señaló que en reuniones sostenidas el 16 de marzo, el 3 de abril, 4 y 7 de abril (esta última con la presencia de la Central Obrera Boliviana y de la Federación Nacional de Trabajadores de Aseo de Bolivia) no hubo resultados favorables. Pese a la predisposición inicial de los extrabajadores para que la Alcaldía mediara, posteriormente, se rechazó esto.

“Lamentablemente han habido algunas posiciones que han sido irreconciliables por parte en algunos dirigentes de estos trabajadores que no nos han permitido (dialogar) en (la) mesa, que no nos han permitido hacer un (plan) adecuado para devolver el trabajo a quienes así lo merecían”, explicó la autoridad edil a tiempo de remarcar que la comuna no tiene ninguna relación jurídica laboral con los extrabajadores que mantienen un piquete de vigilia al frente del Palacio Consistorial.

De acuerdo con la explicación edil, la empresa determinó no renovar el contrato al grupo de extrabajadores luego de someterlos a una evaluación. En marzo, el Ministerio de Trabajo emitió una conminatoria para que fuesen reincorporados, pese a que en el grupo de exempleados se registra a personas que llegaban en estado de ebriedad y no reunían las competencias ni aptitudes necesarias para desempeñarse en sus fuentes laborales.

NO POLITIZAR

Jemio pidió que no se politice el conflicto, toda vez que una ruidosa marcha de los extrabajadores de LPL apoyados por miembros de la Federación Departamental de Trabajadores Mineros de La Paz y de la Central Obrera Departamental ocasionaron daños al bien público por la detonación de cachorros de dinamitas.

El secretario ejecutivo de esa organización, Hugo Torres, aseguró que el despido de esos 85 trabajadores, que mantienen una vigilia por más de 20 días, fue “arbitrario, prepotente y soberbio”.

“Nos hemos concentrado acá en puertas de la Alcaldía para exigirle a Luis Revilla (alcalde de La Paz), que haga caso a la conminatoria del Ministerio de Trabajo, estos 75 trabajadores cuentan con todo nuestro respaldo”, dijo a los periodistas.

Por su parte, los trabajadores despedidos que participaron de la marcha quemaron simbólicamente un muñeco que representaba a Revilla y que en los siguientes días se convocará a un ampliado para evaluar los resultados de la movilización y determinará otras medidas de presión, en caso de no ser escuchados en su pedido de reincorporación laboral.

 
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