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El 5G llega y preocupa a Europa



Por Jimmy Liendo

5G es la tecnología de red celular de quinta generación. En esta red, así como las de generaciones anteriores, el área de servicio cubierta por los proveedores se divide en pequeñas áreas geográficas llamadas células, de ahí el nombre de “celular”. Las señales analógicas que representan sonidos e imágenes se digitalizan en el teléfono, se convierten mediante un convertidor analógico a digital y se transmiten como un flujo de bits.

En una red 5G, todos los dispositivos inalámbricos que sean capaces a conectarse a esta red dentro de una celda se comunican por ondas de radio con un conjunto de antenas locales y un transceptor automático de baja potencia (transmisor y receptor) en la celda, a través de los canales de frecuencia asignados por el transceptor desde un conjunto de frecuencias que se reutilizan en otras celdas.

La diferencia es que esta nueva tecnología utiliza ondas milimétricas, que tienen un alcance más corto que las microondas usadas hasta ahora, por lo tanto, las células están limitadas a un tamaño más pequeño, pero puede soportar hasta a un millón de dispositivos por kilómetro cuadrado, una gran mejora respecto a la 4G, que puede soportar solo 100.000 en la misma extensión, permitiendo un considerable aumento en la velocidad y confiabilidad del internet móvil. La velocidad actual en 4G es de entre 10 a 15 Mb por segundo, mientras que la nueva tecnología permitirá la transferencia ¡de hasta 10 Gb!.

Pero a pesar de todas sus ventajas en mejorar la comunicación, en un informe que evalúa los riesgos de seguridad derivados del despliegue de latecnología 5G, la Unión Europea (UE) advierte sobre la posible proliferación de los ciberatacantes, así como el excesivo poder y control que pueden llegar a tener los estados, en un entorno que involucra a las redes eléctricas, las comunicaciones policiales e incluso los electrodomésticos.

Si bien el informe, revisado por Bloomberg y que se publicará el próximo miércoles, no nombra a China o a Huawei, allana el camino para medidas regulatorias como restringir la dependencia excesiva de los equipos de telecomunicaciones de un solo proveedor, especialmente si este último tiene su sede en un país con bajos estándares democráticos.

“Países terceros pueden ejercer presión sobre los proveedores de 5G para facilitar los ataques cibernéticos que sirvan a sus intereses nacionales”, afirmó la UE en su informe de 24 páginas. “Los proveedores pueden estar sujetos a presiones debido a su propiedad, la legislación y los estados de su país de origen”, se lee en el documento.

Además, el documento advierte en sus conclusiones que la nueva tecnología “aumentará el número de rutas de ataque que podrían ser explotadas por actores de amenazas, en particular estados no pertenecientes a la UE o actores respaldados por el estado, debido a sus capacidades (intención y recursos) para realizar ataques contra redes de telecomunicaciones de los Estados Miembros de la UE”.

Ya que la gigantesca empresa tecnológica china Huawei, mantiene su liderazgo en el desarrollo e implementación de la tecnología 5G, no sorprende la preocupación de la unión europea sobre una posible “extorsión” hacia sus compañías proveedoras de servicios, que necesitarán hacer uso del hardware y equipamiento producido por esta de manera casi monopólica, para poder proveer el servicio de 5G en su territorio. China, piensan los expertos que elaboraron el reporte, podría aprovechar esta ventaja para ejercer presión política a los países a través de esta necesidad, además de facilitar al estado chino, las herramientas que permitan espiar a estas naciones.

Sin embargo, todas estas denuncias y preocupaciones se basan en que China está en constante búsqueda de interceder en asuntos extranjeros, cosa que puede o no ser verdad, pero varios analistas opinan que el negar a la población la facilidad de comunicación que permitirá el 5G, es en si mismo un acto de limitación democrática y de la libertad de comunicación, cosas que los países occidentales critican a China.

El hecho es que, si las naciones occidentales no desarrollan una tecnología alternativa a la que proveen las empresas del gigante asiático, será China quien domine el mercado de las telecomunicaciones, y lo podrán hacer bajo sus propios términos. Aparte de este país, actualmente, Australia,Alemania y Finlandia, se mantienen a la cabeza en el desarrollo del 5G, implementándolo paulatinamente en sus territorios de forma experimental, e incluso en estos países, la mano de Huawei está presente. Se espera que la implementación a nivel global del 5G se de a partir del 2020.

 
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