Abriendo puertas

Empieza un nuevo año… y (como dice la canción de Gloria Estefan) “vamos abriendo puertas y vamos cerrando heridas”.

¿Y qué deseos tenemos para este año? Muchos y en todos los aspectos.

Por ejemplo: en el plano personal (ser mejores seres humanos), en el plano familiar (construir mejores relaciones), en el plano laboral (trabajar mejor cada día), en el plano social (aportar al progreso de nuestro barrio, de nuestra comunidad, de nuestro país).

¿Y en el plano comunicacional…?

El progreso de una nación se lo puede medir por la cantidad de medios de comunicación que tiene, por el grado de libertad de expresión y por la democratización en el acceso a los medios.

El número de estaciones de radio, TV, periódicos y revistas es un barómetro para medir el desarrollo económico, pero también la propiedad de estos medios y el uso que se les da, sirve para medir el progreso intelectual de un país.

Por esta razón, en el 2016 no sólo precisamos más medios, sino más calidad en los medios. Menos programas ligeros y más programas inteligentes. Menos improvisación y más preparación. Menos información y más conocimiento.

Menos fútbol y más deportes. Menos música y más palabras. Menos charlatanería y más mensajes.

Menos copias argentinas y más originalidad. Menos locutores publicistas y más comunicadores con personalidad.

Menos crónicas policiales y más desarrollo humano. Menos publicidad mediocre y más tácticas inteligentes de promoción.

En resumen, la cantidad de medios es importante, pero la calidad es determinante para el progreso cultural, social y económico de nuestro país.

(*) Consultor en Comunicación. Director ejecutivo de Xperticia, empresa de asesoramiento y capacitación en Comunicación.

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