Cómo programar su mente para lograr una mejora específica

• Solo necesita leer con atención este artículo.

• El poder de programar a su propia mente es todo un privilegio que puede otorgarse usted a sí  mismo.

• Todo lo que tiene que hacer es utilizar una variante de la formula de Emile Coué que dice:”Cada día, en todos los sentidos, aprendo a ser  verdaderamente feliz”.

• Con esta programación de media o de una hora diaria, desprogramamos todos los programas subconscientes e inconscientes que nos hacían actuar como personas infelices o carentes de felicidad.

• La repetición mental de una hora es el ejercicio que produce un efecto sorprendente y perdurable pues va influyendo en nuestra manera de pensar, en nuestra manera de hablar y en nuestra vitalidad interna: Nuestro cuerpo entiende el mensaje y comienza a mejorar su salud interna.

• El otro aspecto interesante es el condicionamiento positivo donde aprendemos a sustituir la mala voluntad con la buena voluntad, la actitud de preocupación por el acto de bendecir mentalmente a todas las personas de nuestro mundo, sobre todo, a las personas temporalmente negativas pues con el correr del tiempo y del destino, cada cual se va dando cuenta de su propia insensatez, tarde o temprano, todos lo vamos haciendo y el ejercicio que vamos a practicar desde hoy día, nos aportará una verdadera sensación de felicidad al vivir, al pensar, al actuar, al trabajar y al vivir, nuestra aventura de pasar por este mundo en estado triunfador y en estado realmente positivo; nos vemos en el artículo de mañana.

• Nota importante: Si la repetición se hace en voz alta sin incomodar a otras personas, el efecto de la programación llega a ser mucho mayor, recuerde la sugestión:”Cada día, en todos los sentidos, aprendo a ser verdaderamente feliz”

• Si desea tener una conversación con el autor o una consulta acerca de cualquier problema,   llámeme a los teléfonos del encabezado con confianza (2488284 – 72513317, también se responde por WhatsApp), los problemas sólo se resuelven cuando uno se decide a resolverlos de verdad.