Un sueño en blanco de paredes encaladas y texturas que desafían el sol y el calor en forma de arcos, voladizos y porches. Un diálogo perfecto con la piedra, el agua y las palmeras, árboles, muy propias de esta región balnearia y turística, donde abunda la comida de mar y los buenos tequilas a la hora de animarse un poco más.
Para algunos profesionales de la arquitectura y el diseño interior, el blanco es la ausencia de ornamentación, la neutralidad más absoluta. Pero el blanco, es también un valor en sí mismo cuando se contrasta con la vegetación. Es luz, amplitud, espacio y una herramienta con intención compositiva, que refuerza la disposición de los elementos de la arquitectura. Describe por sí mismo y tiene una clara intencionalidad estética, se puede decir larga vida al color más atemporal en el tiempo.
“La arquitectura construida transforma los cuerpos sólidos de paredes, espacios y ventanas, en luz y sombras. Y es sobre el blanco cuando esas intencionadas sombras que imagina y crea el arquitecto, desembocando en su máxima expresividad”.
Es el caso del Hotel Playa Fandango de Tehualcos en México, pues los sugerentes trazos elípticos de su estructura dibujan las sombras de su volumetría con el sol en los exteriores e interiores.
La edificación ensalza el color de los propios materiales de construcción e impone como estandarte la arquitectura de color blanco, provocada por el contraste de la vegetación además de sellar un ambiente fresco, pese al intenso sol. Nada menos cierto que el blanco realza formas y volúmenes esenciales es lo que hace impecable a la visión en el resultado final de cualquier obra. La sencillez del blanco ayuda también a definir más claramente cuerpos y ángulos. Este efecto es muy evidente en el caso de este hotel tan particular con una fantástica vista al mar y Metro Cuadrado estuvo a visitar la residencia, construida encima de un peñasco y frente al mar caribeño.
El blanco, también es uno de los mejores colores para poder apreciar y hacer evidente una textura. Sea la de un objeto o la superficie de un interior.
Es decir, el blanco es sinónimo de materia noble que evidencia lujo y también, posee la delicadeza de remitir a la textura más tradicional, quizás en una cerámica pulcramente blanca. Un sueño en blanco de paredes encaladas y texturas que desafían el sol y el calor en forma de arcos, voladizos y porches. Un diálogo perfecto con la piedra, el agua y las palmeras, árboles, muy propias de esta región balnearia y turística, donde abunda la comida de mar y los buenos tequilas a la hora de animarse un poco más.
Portada de HOY |
1 Dólar: | 6.96 Bs. |
1 Euro: | 7.77 Bs. |
1 UFV: | 2.29605 Bs. |
Impunidad |