Daño irreparable a Chiquitania

Ante el fuego incesante por más de 45 días en la Chiquitania, la Iglesia Católica emitió un comunicado denominado “Daño irreparable a nuestra casa común”, asegurando que “hay una grave responsabilidad del Gobierno Nacional por el Decreto Supremo N° 3973, que favorece los chaqueos ilegales, sin el necesario análisis y conocimiento del medio”. Además, al igual que otros sectores de la sociedad y los políticos, pidió la declaratoria de desastre nacional y revocar autorizaciones de desmontes y chaqueos.

“Como medidas inmediatas, es necesario que el Gobierno nacional revoque de inmediato las autorizaciones de desmontes y chaqueos, declare emergencia nacional en las zonas afectadas, con promulgación del decreto de inmovilización y pausa ecológica y absoluta prohibición de todo cultivo y extracción, promoviendo solo actividades de reforestación, así como administrar con eficiencia los recursos procedentes de la ayuda nacional e internacional”, según el comunicado.

Asimismo, la Secretaría General de la Conferencia Episcopal Boliviana (CEB) sostiene que hay “serios indicios que detrás de este desastre nacional y humanitario hay una decisión de ampliar la frontera agrícola en Bolivia” que no tomó en cuenta el interés de “la casa común”, ni los principios básicos de la ética ecológica, ni la conformidad de los pueblos indígenas.

Por otro lado, diferentes plataformas ambientalistas formaron una Coordinadora de Defensa del Bosque Seco Chiquitano al no ser escuchados por autoridades nacionales, departamentales y municipales. Saldrán a las calles en defensa de las zonas boscosas del oriente boliviano amenazadas por los incendios forestales. Mientras, los indígenas, asentados en las poblaciones afectadas, anunciaron que iniciarán el próximo lunes 16 de septiembre la décima marcha en defensa de la tierra y el territorio.

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