SIP considera que las libertades viven un “momento peligroso” en América

Sao Paulo.- Las libertades viven un “momento peligroso” en el continente, dijo ayer el periodista ecuatoriano Jaime Mantilla al asumir como nuevo presidente de la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) para el período 2012-2013.

“Asumo esta Presidencia en un momento peligroso para las libertades de nuestra América, son momentos de inmensas pruebas que debemos enfrentarlas con unidad, decisión y certeza de nuestras convicciones”, manifestó Mantilla en un mensaje enviado a través de Internet desde la capital ecuatoriana a Sao Paulo, informó Efe.

Mantilla, presidente del diario Hoy, de Quito, sucede en el cargo al estadounidense Milton Coleman, del The Washington Post, según la resolución aprobada por unanimidad en la 68 Asamblea General de la SIP, que clausuró ayer en Sao Paulo cinco días de sesiones.

El periodista ecuatoriano advirtió sobre la tendencia de “Gobiernos de distinta ideología y de grupos de poder para eliminar las expresiones contrarias y atacar a los medios independientes, atemorizar e inclusive eliminar a quienes denuncien los abusos de los poderes”.

El peligro que suponen el autoritarismo y la delincuencia para la libertad de prensa en el continente fue ampliamente debatido en los últimos días por los periodistas reunidos en Sao Paulo, que señalaron a Argentina, Venezuela, Ecuador, Cuba, Ecuador, Bolivia y México como los países donde los medios de comunicación y los informadores están más expuestos a todo tipo de agresiones.

En su mensaje, Mantilla se excusó por no estar presente en Sao Paulo, lo que atribuyó a “los grandes problemas” que el diario que representa y su país “enfrentan”.

El motivo de su ausencia, según el propio Mantilla, fue “la arremetida de los ataques gubernamentales” que, a su juicio, “se incrementarán a partir del inicio de la campaña electoral” para los comicios presidenciales y legislativos que se celebrarán en febrero de 2013 en Ecuador.

El nuevo presidente de la SIP criticó también la posición de su país en el caso del australiano Julian Assange, fundador de Wikileaks, refugiado en la Embajada ecuatoriana en Londres.

Según Mantilla, la de Ecuador es “una defensa irrestricta a la libertad de expresión de un hábil e irresponsable individuo que consiguió información de manera fraudulenta y la distribuyó en todo el mundo revelando las oscuras maniobras de embajadas y Gobiernos en un claro acto que rompe las bases del periodismo honesto”.

Frente a esa situación, comparó: “mientras eso sucede afuera, en Ecuador se irrespeta totalmente el derecho humano de libremente soñar, expresarse y converger las diferentes visiones de la realidad”.

De otro lado, lamentó que varios de los intelectuales del continente, que contribuyeron para la transformación de la sociedad, ya no ejerzan ese papel.

“Muchos de los ‘rebeldes de pensamiento’ han desaparecido o se han entregado a la defensa de los atropellos de esas mismas libertades que antes defendían”, aseveró.