Los milagros más solicitados

Al iniciarse la semana laboral, me aprestaba a cumplir mis deberes periodísticos sin contar con el concurso de mi discípula, de quien suponía que aún se encontraba en su tierra que es Quillacollo. Cuando de repente apareció en mi despacho para seguir cumpliendo con sus obligaciones profesionales.

Quise saludar su aparición con una merecida apechugada, pero ella rehusó mi abrazo de bienvenida, explicándome que le dolía todo el cuerpo después de haber bailado tanto, enseñándome las plantas de sus pies, lastimosamente ampolladas.

Cuando quise manifestarle mi pena al verla tan lastimada, la heroica descendiente de las Heroínas de la Coronilla olvidó sus dolencias y exclamó con la típica bravura cochala: “¡Que me quiten lo bailado!!!… y comenzó a informar, que es lo suyo.

La dinámica cholita valluna me contó que acompañó al presidente vitalicio Evo Morales a celebrar el nonagésimo cumpleaños del líder cubano Fidel Castro Ruz, acto que tuvo por escenario a Cochabamba y en el cual estuvo nuestro mandatario lesionado, el gobernador de Cochabamba, señor Canelas y los médicos cubanos que trabajan en nuestro país que -según Macacha- son más de seiscientos. Dice mi corresponsal que nuestro mandamás pronunció un emocionado discurso en homenaje al líder barbudo, lamentando no haber podido trasladarse a La Habana, debido a la sesión en su rodilla y que cualquier día de estos visitará a Fidel, o sea cuando Evo pueda arrodillarse. Entre las primicias periodísticas que me comunicó Macacha está que ella pudo enterarse de que Evo conoció a Fidel antes de que él llegase a ser Presidente de Bolivia.

Agradecí a mi discípula por la noticia, solicitándole mayores novedades acerca de los milagros de la Virgencita de Urkupiña, respondiendo Macacha que primicialmente supo que los milagros más solicitados fueron: Uno, trabajar en la Aduana aunque sea gratis. En segundo lugar: Ser nombrado Director o Directora del Fondo Indígena Número 2; el tercer puesto entre los milagros más requeridos a la Virgencita se halla: “Ser designado Ministro de la Presidencia del Estado Plurinacional”. El cuarto lugar: a las guaguachas que nacerán hasta la próxima fiesta bautizarlas con el bonito nombre de “Gabriela”, o sea que el próximo año tendremos centenares o miles de criaturas con ese nombre que trae tanta suerte y si son varoncitos con el nombre de “Evo”.

Eso es lo que me informa mi corresponsal Macacha y yo tengo mucha confianza en sus despachos, aunque mi fe es mucho mayor en la Virgencita.