Barrios: “Soy una chica que nunca se rinde”

Cada historia personal que cuenta un atleta boliviano tiene su propia singularidad, pero en todos los casos se coincide en una palabra: “lucha”, algo que la raquetbolista Angélica Barrios tiene como virtud. La cruceña de 19 años, sueña también con ser médica, una profesión a la que ella apunta lejos al mismo tiempo que al deporte que tanto ama.

Stefanny Angélica Barrios Reyes nació un 5 de mayo de 2000 en Santa Cruz. Sus padres son Henry Barrios y Angélica Reyes, ambos dedicados a la rama médica, pero también fanáticos del deporte.

Angélica dio sus primeros pasos en el ráquetbol desde los ocho años; sin embargo, no fue su pasión, ya que le gustaba practicar todos los deportes.

“Me gustan mucho los deportes, los amo, siempre me encantó practicarlos en el colegio desde que era niña. En un momento llegó el ráquetbol, pasar de un gusto a un amor único”, explicó la joven deportista a Deportes El Diario.

Entonces, la cruceña, con ese amor al ráquetbol, consiguió sus primeros logros internacionales al obtener el subcampeonato mundial de 12 años. Además, ganó varias medallas en el Panamericano Sub-14, como también en el Mundial de República Dominicana. Cabe destacar que, asimismo, cuenta con el título mundial a sus 16 años, además de medallista de plata en los Juegos Suramericanos de Cochabamba.

Los éxitos que tuvo la boliviana son muchos, los últimos fueron la plata y bronce en el US Open, como también ser medallista en el American Iris, rompiendo historia a nivel nacional. Además, cuenta con la medalla de bronce en los Juegos Panamericanos de Lima.

Para llegar a conseguir todas estas distinciones, Barrios tuvo que luchar mucho para poder cumplir sus sueños. “Para participar internacionalmente, mi familia hacía rifas y kermeses. Realmente todos nos sacrificamos mucho”, cuenta.

Todo esto tuvo un límite, ya que Angélica llegó a un momento donde debía decidir si continuar o no. “Hubo un momento que mis padres ya no querían que siga, porque era gastos muy caros, pero mi hermano salió para apoyarme”, destacó.

Angélica cuenta que tiene un gran respeto y cariño por su hermano, uno de sus mentores en este deporte; sin embargo, “me hizo mucha falta en los Panamericanos”, dijo, ya que el Comité Olímpico Boliviano sólo pudo inscribir a dos entrenadores y ella se quedó sola.

La atleta comparó que otras delegaciones “tienen entre cuatro a cinco entrenadores, todos los países cuentan incluso con psicólogos y fisioterapeutas”, algo que llega a pesar en competencia.

“Fue muy difícil para nosotros”, acota, ya que apelaron a apoyarse en todo con todos los atletas nacionales para desempeñarse mejor en los Panamericanos. “Muchas veces nos faltan fuerzas para seguir en un partido, los nervios también pesan en los partidos”, añade.

Angélica cree que es fundamental disputar todas las giras que hacen sus rivales. “Ellos llegan más preparados con estas giras internacionales, prácticamente con más ventaja”.

No obstante, ella lucha esto con el “amor por el raquetbol”, algo que también se transmite a nivel personal, ya que ella estudia la carrera de medicina en la Universidad Gabriel René Moreno.

“Es mi primer año en la universidad, la verdad que esta carrera es para dedicarle mucho tiempo al estudio. Por lo que debo bajar mis horarios de entrenamientos”, dice.

Por tal motivo será un reto para Angélica, quien se considera como “una chica que nunca se rinde”, así apunta llegar a ser profesional y al mismo tiempo entrar al Top 10 mundial, uno de sus objetivos a largo plazo.

“Cerraré con broche de oro mi último mundial”, finalizó Barrios quien jugará con Valeria Centellas (17 años) el Campeonato Mundial Junior, a celebrarse del 9 al 16 de noviembre de este año en San José, Costa Rica.