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Diálogo sin acuerdos

Sector médico ingresó en huelga de hambre

> El dirigente de Sirmes, Fernando Romero, cuestionó que no exista una fecha para retomar las negociaciones


Los médicos instalaron el segundo piquete de huelga de hambre en La Paz, en demanda de la atención a sus demandas.

El diálogo entre el Ministerio de Salud y la dirigencia de los médicos ingresó en cuarto intermedio, en el que no se pudo llegar a ningún acuerdo, razón por la que el sector decidió instalar dos piquetes de huelga de hambre. Los galenos insisten en su incorporación a la Ley General del Trabajo.

En demanda de la atención a sus requerimientos, como la incorporación a la Ley General del Trabajo, los médicos ayer instalaron el segundo piquete de huelga de hambre en el Hospital del Niño de la zona de Miraflores de La Paz.

El dirigente del Sindicato de Ramas Médicas de la Salud Pública (Sirmes), Fernando Romero, uno de los profesionales que encabeza el primer piquete instalado el lunes en el Hospital de Clínicas cuestionó que en el encuentro con el Gobierno no se haya fijado fecha para retomar las negociaciones.

El representante del sector señaló que es censurable que no exista una fecha para retomar el diálogo. “Parecería que es una mala acción de las autoridades nacionales contra nuestro sector (…) el cuarto intermedio es una intención del Gobierno de diluir y dejar en el olvido nuestra demanda y eso no lo vamos a permitir”, dijo.

DISCRIMINACIÓN

EXTREMA

Para el doctor Fernando Romero, quien se encuentra en huelga de hambre desde el pasado lunes, es “una discriminación extrema” que el Gobierno no incluya al sector médico a la mencionada Ley General del Trabajo. Esto significa que cuando un profesional pasa a la jubilación no recibe ningún beneficio en este tema.

El presidente del Colegio Médico de Bolivia, Erwin Viruez, indicó que no existe ningún impedimento legal para responder favorablemente a esa demanda; además sostuvo que el único argumento del Gobierno es la falta de recursos para asumir esa carga laboral.

Señaló que el sector médico también busca, mediante el diálogo, la abrogación de la Ley 1189, que dispone la construcción de 67 hospitales, por haber vulnerado varias instancias de consenso, por lo que las construcciones no estarían adecuadamente planificadas. También exige la renuncia del actual presidente de la Caja Nacional de Salud (CNS), por supuestas irregularidades, lo que perjudica en gran medida a los asegurados, entre otras demandas.

Respecto a la inclusión del sector médico a Ley General de Trabajo, Viruez indicó que hubo avances durante la reunión, no obstante esto no cubre las demandas y necesidades de los profesionales en salud, quienes también proponen que la inclusión no sea con carácter retroactivo.

Informó que la ministra Gabriela Montaño habría indicado que no se puede incluir a los médicos a la Ley General de Trabajo, por razones económicas. Es así que los médicos están a la espera de una nueva convocatoria por parte del Ministerio de Salud, para reanudar el diálogo.

LOS MÁS AFECTADOS

En relación con la espera de los de pacientes, quienes son los más perjudicados con el paro médico, Viruez indicó que el Gobierno prometió brindar salud gratuita a toda la población y proteger a los profesionales en salud, sin embargo, no se cumple de manera adecuada, debido a que el Sistema Único de Salud (SUS) no llega a beneficiar de manera real a las personas, debido a que fue mal planificado y sin recursos suficientes.

Respecto a la reunión entre médicos y el Ministerio de Salud, el director del Hospital del Tórax, Edgar Pozo, indicó que es positivo que se hayan reunido ambos sectores, ya que los directores de los hospitales a nivel nacional propusieron, que se retome el diálogo, lo cual fue mal interpretado por algunos sectores de salud. También dijo que es preocupante que los nosocomios públicos no estén trabajando en toda su capacidad, por lo que sigue recibiendo presión por parte de la población.

CONSECUENCIAS

Los resultados de la no inclusión de los médicos a la Ley General de Trabajo, repercuten como se mencionó, en que al momento de retirarse de su fuente laboral o cuando los médicos pasan a la jubilación, no reciben ningún finiquito económico y en caso de fallecer, tampoco la familia no recibe ninguna compensación económica. Por ejemplo en el caso del fallecimiento del gastroenterólogo Gustavo Vidales, quien sucumbió a la infección por arenavirus, los familiares del galeno, no recibieron ninguna ayuda por parte del Estado, indicó el doctor Fernando Romero.

 
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