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Acciones políticas y control en precios

Desaceleración de economía por efecto del coronavirus

> El bajo crecimiento delo Producto Interno Bruto de la región y Bolivia casi es inminente, debido a la pandemia del covid-19, y es por ello que organismos internacionales recomiendan formular estrategias sociales y económicas.


La gente se cubre la boca para evitar contagiar y contagiarse.

La economía nacional y mundial ingresaron en una situación complicada debido a la expansión del coronavirus, que provocó una baja demanda de materias primas y la ralentización del comercio mundial, y por ello los organismos internacionales ya proyectan menos crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB).

El Ministerio de Economía y Finanzas Públicas y el Banco Central de Bolivia fijaron nuevas metas macroeconómicas, en comparación a lo que elaboró la anterior administración del Estado, como bajar el crecimiento del PIB de 4,26% a 3,5% y la inflación de 3,98% a 3,4%.

A nivel mundial los organismos internacionales ya estiman un menor crecimiento de la economía mundial por efecto del covid-19. La Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal), dependiente de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), a través de la secretaria ejecutiva, Alicia Bárcena, señaló efectos devastadores en la economía mundial y que los países latinoamericanos no estarán ajenos a ellos, a través de varios canales.

En teleconferencia, Alicia Bárcena señaló que la Covid-19 pone en riesgo un bien público esencial, la salud humana, e impactará a una ya debilitada economía mundial.

Recordó que América Latina y el Caribe crecieron a una tasa estimada de solo 0,1% en 2019, y que los pronósticos de la Cepal realizados en diciembre preveían un crecimiento de 1,3% para 2020, pero las proyecciones fueron revisadas a la baja.

Se estima que la contracción del PIB sería de -1,8% del producto interno bruto (PIB) regional, lo que podría llevar a que el desempleo suba diez puntos porcentuales y con ello, de un total de 620 millones de habitantes, el número de pobres en la región suba de 185 a 220 millones, mientras las personas en pobreza extrema podrían llegar a 90 millones.

El Covid-19 afectará a la región por la disminución de la actividad económica de varios de los principales socios comerciales, como China, principal mercado de Chile, Perú y Brasil, y las exportaciones de la región a ese destino podrían caer hasta 10,7% en valores, según Bárcena.

Acciones

Ante ese contexto negativo, Ceyla Pazarbasioglu, vicepresidenta de Crecimiento Equitativo, Finanzas e Instituciones (EFI), Grupo Banco Mundial, señala que a medida que el virus se propaga por el planeta, la pregunta es ahora si se pueden proteger las vidas de las personas y detener los daños económicos, en su blog del ente internacional.

“A partir de experiencias pasadas, sabemos que una acción firme, coordinada y rápida marca la diferencia cuando la economía mundial enfrenta una amenaza común. Eso está empezando a ocurrir. Diversos países han anunciado programas de estímulos, varios han reducido las tasas de interés y tanto el Grupo Banco Mundial como el Fondo Monetario Internacional (i) han dado a conocer grandes paquetes de asistencia financiera para ayudar a los países a afrontar la crisis sanitaria y limitar los perjuicios económicos”, apunta.

Anticipó que en las próximas semanas, todos los países deberán tomar medidas de políticas concretas para proteger a sus poblaciones y reducir los daños a sus economías, tal como lo hicieron a nivel mundial Francia, España y Estados Unidos, países que anunciaron una inyección de entre 100.000 millones a 300.000 millones de dólares para ayudar a sus empresas a sortear la crisis.

Bolivia no se quedó atrás. Se decretó ayuda económica para los padres que tienen hijos en primeria, en escuelas fiscales, con un “Bono Familiar” de 500 bolivianos, una pausa en el pago de capital por el lapso de dos meses en crédito, diferimiento del pago de impuestos a cuotas, la reprogramación de financiamiento y la suspensión de procesos tributarios.

Sin embargo, los empresarios han solicitado mayores medidas que sean integrales, como mediar en el pago de alquileres de pequeños emprendimientos, la congelación del aumento salarial, la flexibilización de acceder al crédito para la reactivación así como promover el consumo nacional, entre otras sugerencias.

Alerta

Mientras tanto, Pazarbasioglu alerta que lo que viene será crucial: en las próximas semanas, todos los países “incluso aquellos que no tienen ningún paciente con la enfermedad por coronavirus” deberán tomar medidas de políticas concretas para proteger a sus poblaciones y reducir los daños a sus economías.

Nadie puede predecir de manera fiable el impacto económico total. Demasiado depende de cosas que son imposibles de saber, como la duración del brote, la cantidad exacta de países afectados y la magnitud de la movilización y mantención de una respuesta normativa rápida, coordinada y concertada. Pero sí sabemos que el brote se manifestó en un momento en que la economía mundial estaba débil, cuando el crecimiento global empezaba a recuperarse de su tasa más baja (i) desde la crisis financiera de 2009, señala.

Condiciones

Eso tiene consecuencias preocupantes para los países en desarrollo: condiciones más estrictas de los créditos, un crecimiento más débil y el desvío de recursos públicos para combatir el brote podría disminuir los fondos disponibles para prioridades de desarrollo fundamentales. Una recesión económica podría afectar también la lucha contra la pobreza extrema. Es imprescindible, por lo tanto, que los encargados de formular las políticas en todas partes reconozcan de qué manera los daños económicos se pueden traspasar de un país a otro, y actúen rápidamente para prevenir que se propaguen.

Frente a la propagación, los países de la región han cerrado sus fronteras, algunos países siguen con la misma medida, y todo apunta a que la región tome similares medidas e ingrese en cuarentena.

Sin embargo, los ciudadanos de algunas ciudades no toman en serio las medidas asumidas por sus gobiernos, como lo realizado por partidarios del anterior Gobierno del MAS, que instigan y se resisten a quedarse en casa.

Propagación

La ejecutiva del Banco Mundial señala que es probable que ese traspaso de la crisis económica se produzca a través de diversas vías. La primera es el comercio: las cadenas de valor mundiales, que representan alrededor de la mitad del comercio mundial, se ven interrumpidas por cierres de fábricas y retrasos en la reanudación de las operaciones.

La segunda son los flujos financieros externos, que se podrían retirar de los países afectados por esta enfermedad. La tercera es el capital nacional —tanto humano como financiero— que está empezando a ser desaprovechado a medida que las fábricas están inactivas y las personas permanecen en sus hogares.

La cuarta es el transporte y el turismo, una importante fuente de ingresos para numerosos países en desarrollo que está disminuyendo con la baja de la demanda y el aumento de las restricciones para viajar. Por último, las bruscas caídas de los precios de los productos básicos perjudicarán a los países en desarrollo que dependen de ellos para obtener ingresos que tanto necesitan.

Proteccionistas

También recomienda que los Gobiernos deben evitar las políticas proteccionistas, que podrían empeorar las alteraciones en las cadenas de valor mundiales y aumentar los ya elevados niveles de incertidumbre.

Pero más importante aún, los Gobiernos deben evitar la restricción de las exportaciones de alimentos y productos médicos necesarios y, en cambio, trabajar juntos para apoyar una mayor producción y asegurar que los recursos lleguen a los lugares donde más se requieren.

PAÍSES EN DESARROLLO

Aumentar el gasto en salud: en muchos países en desarrollo, los sistemas de salud pública siguen siendo débiles, haciendo que sus poblaciones sean vulnerables a la rápida propagación del brote. Los Gobiernos deben incrementar las inversiones que refuercen estos sistemas para permitir programas de tratamiento y control más rápidos.

Fortalecer las redes de protección social: las transferencias de efectivo y los servicios médicos gratuitos para las personas más vulnerables podrían ayudar a frenar el brote y también a limitar los daños financieros derivados de este.

Apoyar al sector privado: dado que es probable que empresas de todo tipo se vean afectadas, sería beneficioso que estas tengan acceso a créditos, reducciones de impuestos o subsidios de corto plazo.

Contrarrestar las alteraciones de los mercados financieros: los bancos centrales en los países en desarrollo —en particular aquellos que son susceptibles a periodos de aversión al riesgo— deben estar preparados para reaccionar a movimientos de los mercados financieros incontrolados. Tal vez necesiten bajar las tasas de interés e inyectar liquidez para restablecer la estabilidad financiera y aumentar el crecimiento.

Los responsables de las políticas enfrentan tiempos difíciles y deben estar a la altura de las circunstancias, actuando de manera rápida, firme y colaborativa.

PRECIO DE COMMODITIES EN CAÍDA

La caída de los commodities afectará sobre todo a los países exportadores de materias primas en América del Sur, y por último, el temor a la inversión de capitales, lo que ya se aprecia en la fuerte disminución de los índices bursátiles en la región.

El grado de desigualdad es también importante para evaluar hasta qué punto la crisis impactará en los grupos más vulnerables de la sociedad. Mientras más desigual sea un país, más llevarán estos grupos el peso del impacto económico de la pandemia y menos recursos tendrán para combatirla.

La pandemia es también una oportunidad para recordar los beneficios de la acción multilateral, la coordinación de políticas puede ir en apoyo de los países pobres, ya que las asimetrías entre las naciones desarrolladas y en desarrollo se notarán cada vez más, puntualizó.

 
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