Rivera y Rodas son recluidos por presión en la cárcel de Palmasola

Luego de guardar detención en las celdas de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (Felcc) durante cuatro días pese a un fallo, el juez de medidas cautelares, Juan José Zubieta, finalmente decidió enviar a la cárcel cruceña de Palmasola a Fernando Rivera Tardío y Dennis Rodas Limachi, los que son acusados de ser los principales cabecillas de la red de corrupción y extorsión.

La autoridad judicial tomó esta decisión debido a que fue criticado y cuestionado, especialmente por el ministro de Gobierno, Carlos Romero, ya que ambas personas desde que fueron aprehendidos, la pasada semana, permanecían en celdas de la Felcc de Santa Cruz.

El traslado de ambos se cumplió aproximadamente a las 11:00 horas, bajo un fuerte resguardo policial desde las celdas de la Felcc. Fernando Rivera y Dennis Rodas fueron enmanillados y escoltados por varios efectivos del orden fuertemente armados.

De acuerdo con Jerjes Justiniano, abogado de Jacob Ostreicher, la decisión de trasladar a Rivera y Rodas al centro penitenciario de Palmasola, luego de la orden emitida por el comandante de la Felcc de Santa Cruz, coronel Miguel Gonzales, éste habría enviado una carta al Juez Sexto de Instrucción en lo Penal, en sentido de que las celdas de dicha instancia policial no reunían las condiciones de seguridad para que los dos permanezcan en el lugar.

La determinación judicial surge, después de que el Ministerio de Gobierno denunciara que el juez cautelar y los fiscales encargados de esclarecer este caso “han develado con sus acciones, la intención cuestionable de favorecer a los principales responsables de la red de corrupción y extorsión que presumiblemente mantienen intacta su capacidad de influencia y sometimiento de la justicia”.

La madrugada del sábado 1 de este mes, Zubieta sentenció, en primera instancia, que los supuestos cabecillas de la red de extorsión, Rivera y Rodas, sean trasladados con detención preventiva a la cárcel de Palmasola. Pero ante un pedido de los acusados, de manera expedita y sin verificar el presunto riesgo sobre la integridad de ambos, la autoridad judicial había decidido su traslado sólo a celdas de la Felcc.

La madrugada de ayer, los fiscales del proceso contra la red de corrupción y extorsión también dejaron en libertad a su colega el fiscal Roberto Carlos Achá, acusado de haber forzado la acusación contra el ciudadano estadounidense Jacob Ostraicher y haber obligado al juez de ese proceso a cambiar una sentencia de libertad en favor de esta persona.

“Ambas decisiones se manifestaron entre las doce de la medianoche y las dos de la madrugada. El juez cautelar, además, dejó sin efecto la imputación de organización criminal contra los cabecillas de la red de extorsión y corrupción; decisión que aliviana la labor de defensa de los acusados”, denunció el Ministerio de Gobierno, antes de la reversión de la decisión inicial de Zubieta.