“Un Presidente no debe incitar a la violencia”

Evo Morales, ayer, al momento de autoproclamarse ganador de las elecciones, aun cuando no se concluyó el conteo oficial al 100 %, llamó a los movimientos sociales a organizarse y movilizarse para “defender la democracia”.

Inmediatamente se hicieron eco de este pedido, dirigentes de la Central Obrera Boliviana, Bartolinas y un segmento de los Ponchos Rojos que amenazaron con chicotazos, cercos a La Paz para evitar el ingreso de alimentos e incluso se mencionó el uso de “armas”.

“Uno de los principios que debe tener el Presidente de un país, es que de cualquier forma debe evitar que se genere violencia y no incitar al enfrentamiento entre bolivianos”, indicó ayer el asambleísta alteño Marco Fuentes, al referirse a las declaraciones de Evo Morales.

“Esta actitud de la autoridad, del llamado a sus organizaciones afines al partido de MAS, para defender lo indefendible, es para nosotros jugar con fuego y de esta forma terminar en una confrontación, que es lo que menos se quiere, a pesar de que ya es un Gobierno muy cuestionado no solo a nivel nacional, sino fuera de nuestras fronteras, actitud que ha provocado la indignación de toda la ciudadanía lo cual podemos llamarlo una rebelión democrática”, manifestó Fuentes.

Ayer, al momento de autoproclamarse ganador de las elecciones, antes de conocerse cifras oficiales del conteo, Morales denunció “que está en proceso un golpe de Estado en Bolivia con apoyo internacional, por lo que llamó a los movimientos sociales a organizarse y movilizarse de forma pacífica y constitucional para defender la democracia”.

“Denunciar ante el pueblo boliviano y al mundo entero, está en proceso un golpe de Estado, se preparó la derecha con apoyo internacional para un golpe de Estado (...). Quiero decir al pueblo boliviano, primero, estado de emergencia y movilización pacífica y constitucional (…)”, señaló en conferencia de prensa, en la ciudad de La Paz.

Pese a que exhortó a defensa pacífica, dirigentes campesinos de las federaciones Tupak Katari y Bartolina Sisa amenazaron con usar armas y chicotes para defender a Evo Morales y ante las movilizaciones ciudadanas en defensa del voto que se registran en los nueve departamentos desde el lunes pasado.

El dirigente de la provincia Inquisivi, Epifanio Morales, en días pasados, dijo que exigirán el respeto al “voto mayoritario” de los campesinos e indígenas a través de un cerco a la Sede de Gobierno, con el objetivo de “evitar que ingresen alimentos”, asimismo, llamó a efectuar contramarchas; al referirse a las manifestaciones ciudadanas que protestan por el “fraude gestado para llevar a Morales a ser el ganador de las Elecciones en una primera vuelta”.

Según Marco Fuentes, existen muchos indicios de fraude que se gestó desde el Tribunal Supremo Electoral, por eso de forma enfática advirtió que Evo Morales, “no va a querer retroceder (…)”.

La Central Obrera Boliviana (COB), luego de un ampliado, se declaró anoche en estado de emergencia y llamó a los trabajadores afiliados a esa organización a estar alertas para defender la democracia, que “se ve amenazada por grupos radicales de oposición, luego de las elecciones generales del domingo”.

Después mineros amenazaron con llegar hasta las protestas cívicas que se efectúan en Cochabamba y también se denunció por redes sociales que al menos 20 mil cocaleros del Chapare llegarían para amedrentar a la población que protesta “por el fraude”.

La dirigente Fidelia López dijo que no permitirán que Carlos Mesa ingrese a la presidencia. “Si entra directo a la chirola (cárcel) va ir, no queremos que vuelva a masacrar y hacer llorar a los niños” advirtió en alusión a lo ocurrido en 2003 durante el llamado “octubre negro”.

El ejecutivo departamental de los campesinos, Manuel Mollericona, expresó que hay molestia en las bases campesinas porque se está presionando “mucho” al Tribunal Supremo Electoral y anunció vigilias para defender a Morales, según publicó la agencia estatal Abi.