Base militar chilena entorpece diálogo

El expresidente de Bolivia y líder del Partido Demócrata Cristiano (PDC), Jorge Tuto Quiroga, afirmó ayer que la base militare chilena, situada a pocos kilómetros de la frontera boliviana y próxima a las aguas del manantial del Silala, no contribuyen al diálogo entre ambos países y rechazó justificaciones del vecino país.

“Es una actitud que no contribuye a construir un clima de diálogo que queremos entre los países y lo lamentamos como bolivianos”, dijo.

Aquella declaración surgió luego que el ministro de Defensa de Chile, Antonio José Gómez, afirmara que no existe una base militar a 15 kilómetros de la frontera boliviana, sino que se trata de trabajos de intensificación del patrullaje militar, por parte del vecino país para evitar robos y contrabando.

Quiroga calificó las afirmaciones del diplomático chileno como agresiones y amedrentamientos por parte del vecino país, afirmó además que el argumento de Chile de combatir el narcotráfico solo se trata de una excusa “ridícula”.

“Como bolivianos rechazamos el amedrentamiento y la agresión de Chile de intentar justificar las instalaciones militares y la presencia militar en la frontera, en medio de una situación donde Bolivia es muy claro y contundente verbalmente, es muy claro y contundente jurídicamente, pero jamás pasamos a la beligerancia, no militarizamos fronteras”, declaró.

En ese sentido, señaló que aquel movimiento militar, poco usual en la región fronteriza, desató nuevamente un ambiente de tensión entre los gobiernos de Bolivia y Chile.

Arguyó que las acciones de lucha contra el narcotráfico y el contrabando son labores de los efectivos policiales, quienes son los encargados de encarcelar a la gente inmiscuida en ese tipo de hechos; por tanto, no corresponde a los militares atender ello.

"La policía es la que lucha y hace las incautaciones de droga, entonces es ridículo argumentar que con armamento militar y destacamentos militares, Chile va luchar contra el narcotráfico y el contrabando", sostuvo el exmandatario del país.

En el tema marítimo como de las aguas del Silala, políticos bolivianos del oficialismo y de la oposición dejan de lado sus diferencias y manejan un solo discurso de respaldo a la política internacional boliviana en defensa de la soberanía y de los recursos naturales del país.