Cómo curar a nuestros seres queridos

Nuestra mente puede hacer cosas asombrosas si uno sabe concentrarse. Existe un ejercicio mental que sirve para corregir o mejorar las relaciones familiares que están en mal estado o en estado de negatividad o de sufrimiento.

Para hacer el ejercicio de “curación mental” debes recostarte y contar del cincuenta al cero hasta que tu cuerpo se relaje y para concentrar la mente se debe contar del diez hasta el cero.

Una vez logrado este primer paso, debes comenzar por imaginar a tu ser querido sentado y dándote la espalda, debes hablarle mentalmente y decirle que la sanación mental comienza por situarse en el ahora y en la intención de sanar todos nuestros sentimientos heridos. Vamos a decirle a nuestro ser querido que repita mentalmente: “todas mis heridas emocionales o sentimentales se están sanando”, vamos a hacer que repita unas diez veces o más.

Luego nos imaginamos a nosotros mismos recostados, bien relajados y procedemos a sanarnos y programarnos a nosotros mismos para controlar el poder de nuestra actitud para poder tener una actitud de éxito, de tranquilidad, de serenidad y de bienestar a toda prueba.

En la parte final del ejercicio debes imaginarte dando vueltas alrededor de tu ser querido y de ti mismo pronunciando palabras para que esa relación sean sinceras, inofensivas y amorosas a toda prueba. Así finaliza el ejercicio de “sanación mental” de un ser querido y de ti.

Repite el ejercicio una o dos veces al día durante diez días y notarás unas mejoras agradables y muy satisfactorias.