El Tigre arranca campeón

Es una realidad, el momento que comience el partido en Potosí frente a Real, los de Achumani serán campeones de este torneo y estarán logrando el “TRI” tan ansiado por su hinchada. Se cae de maduro explicar que el partido comienza cero a cero, y un punto es lo que necesita The Strongest para libar las mieles de la gloria. Otra será la historia de cómo finaliza el encuentro y con qué resultado. en cualquier disciplina deportiva no importa cómo empieza el partido sino como termina, si tiene dudas pregunten a San José que ganaba tres a cero a Wilstermann, los “K’ochalas” empataron y los “Santos” terminaron pidiendo hora. Me da la impresión que este partido será la Espada de Damocles que se posará sobre la cabeza de Ferrufino en un par de semanas más, cuando termine la temporada y los directivos orureños evalúen el rendimiento del equipo y, de acuerdo a los resultados conseguidos, el premio que les corresponde.

Le recuerdo que Damocles fue un cortesano criticón del tirano Dionisio en Siracusa, que siempre hablaba del poder y las comodidades de su rey, Dionisio lo invitó a ser rey por un día y disfrutar de los banquetes y doncellas, claro que Damocles accedió, cuando en pleno bailongo, todo sentadote en trono prestado, Damocles miró hacia arriba y vio una filosa y puntiaguda espada que colgaba del techo sujetada por una crin de caballo, que de cortarse, justo le atravesaba la cabeza. En ese momento se le cortó la conga, no quiso comer más y menos manotear una pichocha, de esa manera comprendió que la gente de poder y los que aparentemente tienen todo cómodo y asegurado están expuestos al peligro permanentemente.

Si no consigue mínimo la Libertadores, estará expuesto a una evaluación influenciada por la desilusión y algunos numeritos que aparecerán, no creo que rojos, pero si naranjas. Espero que no, al Flaco Ferrufino lo considero un gran técnico, tiene la enorme ventaja que tienen pocos, la de sopesar las fortalezas de la gente que se contrata para exprimirle lo mejor que tienen en puestos específicos.

Demostró siempre ser un gran motivador y a esto hay que sumar disciplina, orden, constancia y se completa la figura. Que tiene un carácter podrido, es cierto; que tiene pocas pulgas, es cierto; que es un pésimo perdedor, es cierto, pero ¡qué me importa!, ¿Acaso los dirigentes o jugadores se van a casar con él? ¿Van a compartir departamento? ¿Lo van a nombrar padrino de sus wawas? ¿Le van a llevar una torta el día del amigo? ¡NO!. Entonces, creo que hay que evaluarlo desde lo estrictamente profesional y punto, que es odioso con la prensa, ni modo, problema de aquellos que quieren seguir haciéndose rigorear, pero nadie puede negar sus condiciones, su espíritu ganador y su capacidad de estratega.

El Tigre arranca campeón y en 90 minutos tendrá que defender ese status mínimo con un empate, San José por el contrario tendrá que buscar, trabajar la victoria obligatoria para esperar el tropiezo.

Del dicho al hecho hay mucho trecho y todos saben que hasta el pitazo final no se puede asegurar nada.

Celebro este tipo de definiciones, apretadas, ansiosas, emocionantes, son inyecciones de energía que precisa, entre otras cosas, nuestro escuálido fútbol.