Empresarios piden cambios en el modelo económico

Ante los diferentes problemas que confronta el país debido a la recesión económica, los empresarios plantean la urgencia de cambiar el modelo económico, no solamente para superar la crisis sino para conseguir efectivamente un desarrollo armónico y sostenido. Creen que así como lo expresaron las entidades Cámara Nacional de Industrias, Asociación de Bancos, Cámara de Comercio y, sobre todo, los análisis realizados por economistas y entidades de prestigio, el país no puede ni debe seguir con el actual modelo económico. Creen que la crisis en que se vive no será solucionada con simples concesiones salariales o aprobación de un doble aguinaldo, basados en “un crecimiento superior al 4,5%”, pese a que lo conseguido en años pasados no fue real.

Consideran que hay cinco problemas para los cuales se requiere encontrar soluciones: remedios efectivos para el excesivo déficit fiscal; corregir la ineficiencia del gasto público; modificar la ineficiencia y regresividad del sistema tributario; la baja competitividad de los factores productivos; y, corregir la ausencia de una base sólida de crecimiento económico. Cinco soluciones que, en criterio de los empresarios, darían lugar a contar con políticas firmes y realistas para enmendar los actuales problemas.

En diversas oportunidades, el empresariado privado ha sugerido cambios en las políticas económicas, sin lograr resultado alguno del gobierno; han pedido que se amplíe los fundamentos para conseguir inversiones, no solamente foráneas sino internas porque, dijeron, no están dadas las condiciones para inspirar confianza en quienes son poseedores de bienes de capital financiero, tecnología y material humano capaz y eficiente que cambie efectivamente las políticas productivas; pero, por una parte, han perjudicado las diversas posiciones de algunos empresarios que han vivido preocupados solamente por sus problemas y no han encontrado cauces para buscar y hallar soluciones integrales considerando la política económica del país; por otra parte, la falta de unidad y homogeneidad en los planteamientos han debilitado posiciones en el sector privado y han determinado, a la vez, ciertas políticas de apoyo al régimen, que se han encargado de crear susceptibilidad y desconfianza no solamente entre los empresarios sino en la misma colectividad.

A los cinco puntos planteados para el logro de un nuevo modelo económico habría que agregar lo que es fundamental: planificar y obrar con la verdad, sin sofismas de alguna clase; comprender que las inversiones que se logre, por ejemplo en el campo de los hidrocarburos, no se crea que serán rendidoras y productivas en lo inmediato y que lo mediato o sea a largo plazo, tardará mucho en llegar. Esto implica no contar con resultados rápidos sino a muy largo plazo y, para ello, basarse en experiencias del pasado que muestran lo previo, como trabajos de exploración y explotación que requieren mucho tiempo. Finalmente, que el gobierno, conjuntamente muchos empresarios excesivamente creídos y optimistas abandonen los campos de las ilusiones y vivan realidades, obrando con la verdad.